El restaurante Xadó es actualmente una buena opción en Palafrugell tanto para probar su cocina mediterránea de productos frescos (pescados) y arrocesc como la marroquí, la carta es casi mitad y mitad.
El motivo es que el cocinero y propietario del establecimiento fue durante más de 20 años el cocinero del Hotel Llafranch, celebre por su arroz negro.
Reconozco que el local una vez dentro no está mal, pero no está en una buena situación ni es atractivo, delante del pavellón de deportes, un poco escondido, en fin, no es muy acertado.
Una vez dentro y sentado, buena cocina, yo no soy especialmente amante de la marroquí con lo cuál me fuí a lo seguro. Unos entrantes que fueron una ensalada con tallarines de calamares y langostinos (buena) y hojaldre de puerros y langostinos (muy bueno). Y de segundos, arroz negro para los dos, para mi, impecable.
De postres, allí sí que me paso a la resposteria árabe, unas crepes que no había probado nunca y las pastitas típicas árabes (muy dulces) pero que me encantan, acompañado de un té verde como debe ser.
La verdad, comida bien elaborada, con producto fresco (en el arroz se nota y mucho), con un servicio atento y nada agobiante (creo que alguno es el hijo del cocinero).
De vino, pues me lanzo al vacío y nunca mejor dicho y me dejo aconsejar por un vino marroquí que en mi vida había probado (yo diría que nunca había probado un vino de ese país), un Sidi Brahim rosado, que la verdad, pegaba bastante bien con el arroz, y al ser frio y tal pasaba bien la verdad, y el precio, muy económico, 9.5 euros la botella. Por lo que ví la mayoría de vinos son de un precio muy ajustado, creo que ninguno supera los 20 euros.
Una cosa que me llamó la atención y no había visto nunca, en la carta sale que si piden un vino y no te lo terminas, te dan una bolsa (parece bonita por cierto) y te tapan el vino con un tapón y te lo llevas a casa. Al principio sorprende pero luego dices, caramba, y porqué no? (no fue el caso).
Al final, una comida muy agradable y placentera que salió por 64 euros los dos, 32 por persona lo cuál considero una muy buena relación calidad-precio.
Volveré, y no tardaré mucho, y quizás me atreva con la cocina marroquí ya que algún plato que ví la verdad es que la pinta era excelente.