Venir a RIFF es como ir a la escuela, Bernd cercano y amable, al igual que Paquita (todo lo que el trabajo le permite) se encargan que la experiencia sea grata y didáctica.
En eta ocasión probamos los siguientes platos (se trataba de un menu extenso de 11 platos que no recuerdo completamente)
Tartar de ostra: genial. la ostra picada con mimo y en una suave salsa que le aporta los matices de un tartar respetando su naturaleza.
Sopa de Boletus: untuosidad, agradable y muy sabrosa.
Mollejas: nuevo para mi, extraodinario el punto de cocción se acompaña con unos ajos tiernos y una crema servida en la mesa.
Anguila a la brasa: Capricho creativo donde los allá, nos encantó.
Salmón salvaje I N C R E I B L E ....
Terminamos con una ración de arroz con gambas que como siempre está por encima de la media y dos postres:
Higos con requeson y lichys con limon un gelatina de rosas.
Para ir, volver, repetir y quedarse a la cena!!