Flechazo a primera...copa

En mi ignorancia (debida a la escasez de finos y manzanillas por mi zona) opinaba que el fino y la manzanilla eran los únicos vinos que no me atrapaban. Qué equivocado estaba, gracias a un buen amigo, compré una botella del Fino TRES PALMAS, embotellada el 31/10/2014 (con 16º de alcohol) y que me ha hecho enamorarme de este vino.
Fantástica nariz, de salinidad, de flor, de caliza, de frutos secos y de mucho más. En boca tiene una entrada fresca, se muestra liviano en paso, no denota su alcohol, muy fluido pero graso, sabroso e intenso, un gran y largo final, retornando gratamente esa notas finas que rallan al filo entre el fino y el amontillado, un placer que dura por largo.
Un vino que recomiendo a todos los que, como yo, no habían encontrado el camino hacía el fino.
La copa vacía, horas después sigue emanando ese maravilloso perfume, que no me canso de oler.