Tras comer el viernes de la semana anterior, lleve el sabado a mi mujer y unos amigos a que conocieran el local, siendo muy de su agrado, por lo que reservamos mesa el sabado 1-11-2008 para celebrar en esta casa el cumpleaños de mi mujer. Previamente, Juan, siempre atento y via mail, nos sugirio algunos platos, confeccionando un menu con tres entrantes, plato principal a elegir, quesos y postre. Sobre el local (decoracion, copas, cuberteria, etc) me remito a las opiniones anteriores. Un lujo. Ya en mesa, lo unico negativo fue el ritmo inconstante del servicio, apresurado al principio, y luego lento al rellenar las copas de vino. Esta claro que Juan no puede estar en todas partes, pero el personal debe tener mas iniciativa, siendo impensable demandar tres veces una copa de vino. En cuanto a la cena en si, ajo arriero con trufa (excelente, de textura y de sabor) regado con Andre Clouet Milles (5´75 euros copa), un champagne con recorrido enorme, surtido de ibericos (lomo, chorizo, salchichon y jamon, todo rico) continuando con el champagne y acabando con el George Vernay Coteau du Vernon, un blanco que por si solo justifica una vida y tomate de El Perello con cogote de bonito (como el de la abuela, grande) continuando con el blanco. Los platos principales tuvieron zonas grises, en especial por lo poco acertado del Magret de pato, excesivamente seco e insulso. Fantasticos el rabo de toro, la carrillera al oporto y los solomillos de buey, y solo pasable el centro de lomo especial, manifiestamente mejorable en cuanto al corte y el tiempo en plancha. Ojito a los vinos que nos cascamos con la carne y los quesos. Volnay Les Santenots 2005 (9´11 euros copa), dos botellas de Clos Mogador 2001 (61´17 euros botella) y Clos Dominic Seleccio Miriam (7´74 euros copa). El primero, un tinto de Meursault puro terciopelo, luego la joya del Priorato y para acabar el ya comentado Dominic, otra maravilla. Con los postres, tarta de calabaza y browny, no sé si algo mas, bebimos Ogereuau Bonnes 2005 (6´17 euros copa), Bablut 1997 (8´50 euros copa) y La Bota PX Montilla (6´31 euros copa), quedandome con este ultimo, puto chocolate. Luego gin-tonic y un whisky, menos dos resistentes al vino, que seguimos con el Clos Dominic. Juan siempre divertido, ocurrente y enciclopedico en su conocimiento del vino, aunque califique algunos de lejia!!! Una velada unica e inolvidable. Viva el vino!