Buen restaurante en general.

Paseando por el centro historico, muy cerca de la Grand Place, esta estas calles tipicas llenas de restaurantes para turistas, es gracioso como los camareros te intentan convencer de que entres a cenar a sus locales, con el marisco expuesto como reclamo en las puertas, muy curioso, pero este en concreto no utiliza estos medios de presión, por eso lo elegimos, y porque había gran cantidad de mesas ocupadas y eso siempre es un buén indicativo en estos casos turisticos, pues bién cenemos una mariscada estupenda, con un género fresquísimo que parecía recién sacado del mar, pongo unas fotos, lo recomiendo en cuanto a marisco aunque supongo que habrán muchos locales en esas mismas calles que lo tengan así de bueno también, una experiencia buena, lo reguemos todo con 2 botellas de blanco frances Laserre 2007.