Dificilillo de encontrar! El local es no es grande, aprox. 10 mesas, pero acogedor y dispone de cierta comodidad.
Una lastima el problema de humos y olores, incluso a pesar de la enorme campana que tienen encima de la bonita cocina exterior, y es que éste es precisamente el problema, la cocina vista, está solo separada del salón comedor por una barra en medio del local.
Y digo que es una lastima por que este restaurante atesora una mas que interesante cocina gallega, bien preparada y con una selección de materias primas realmente admirable.
Vivero propio, de Langosta y Bogavante vivos, ostras y almejas de carril.
Excelentes también las carnes gallegas, bien cortadas y perfectamente preparadas.
La bodega es mucho mas completa en propuestas gallegas (Albariños, Ribeiros y Godellos) aunque también disponen de otras Denominaciones, fundamentalmente Riojas y Riberas.
En General, Relación Calidad Precio muy razonable y bien equilibrada.
Muy interesante cocina Gallega y de Mercado en p