El mejor mero de Perú

Restaurante de origen chiclayano (en el norte de Perú). Yo había conocido en 2009 (año en que estuve de vacaciones en Perú) el local que tienen en Trujillo (también en el norte) y nos gusto bastante (sobre todo recuerdo un ceviche de mero, de estos de quitarse el sombrero).
El pasado sábado, para celebrar mi 55 cumpleaños y mi 29 aniversario de boda, fuimos a darnos una alegria en el local de Miraflores. Al hacer la reserva indique que me gustaría reservar un "collar" de mero murique (plato que se les suele terminar, debido a la gran demanda que tiene (es un plato emblemático del restaurante). El mero murique es una variedad que se pesca en la costa norte del peru y mas que al mero español, yo diría que se parece al cherne negro canario. Se trata de una variedad de mero muy fina y a la vez muy sabrosa (a mí personalmente, es de los pescados que más me gustan). Lo que denominan collar es nuestro cogote, pero sin la cabeza y sin rajar por la ventreska, de tal forma que puede asemejarse a un collar. Lo preparan frito en una pieza (crujiente por fuera y jugoso por dentro) y lo sirven sobre una base de salsa de ají amarillo y con un arroz verde (con guisantes frescos) como guarnición.
Al llegar y mientras nos tomabamos unas cervezas (Cusqueña Red Lager)nos confirman que nos serviran un hermoso collar de 1,450 Kg. La jefa de sala nos sugiere que dado el buen tamaño, sólo tomemos un entrante para compartir. Decidimos hacerle caso y pedimos una causa de langosta.
Para beber, un chandon (argentino) brut rosé, que acompaño bien al almuerzo.
Como aperitivo sirvieron unos canapés de pejerrey(pez de piscigranja similar a los chirretes, insulso y basto) reozado y acompañado de "chalaca" (picado de cebolla roja, aliñado con limon, ají y cilantro). Para olvidar
Llega la causa. La presentación espectacular, con el montaje de la causa simulando la cola de la langosta y la cabeza decorando.
Esta causa era la primera vez que la tomabamos y resultó un plato mundial (de 9,5) La sobre la base habitual de la causa (láminas de aguacate y el pure de papa amarilla ligado con ají, limón y aceite) las áminas de la carne de la cola de la langosta crudas, cortadas tipo carpaccio. Finalment ya en la mesa, regaron la causa con leche de tigre (el aliño de los ceviches). Plato perfecto.
Una vez acabado sin dejar ni gota, llegó el collar de mero: otro plato redondo. Un mero de una calidad excepcional y en su punto de fritura perfecto.
Como postre unos picarones para compartir, nivel medio-alto
el precio, elevado aunque justificado por la calidad de las materias primas, nada habitual.
en cuanto al entorno, la decoración moderna y con gusto (como es frecuente en los restaurantes de lima)
El servicio perfecto en general. en cuanto al servicio del vino, buenas copas y nunca tuvimos que avisar para que nos las llenaran.
Resumen.satisfacción total