Sigue en su buena linea.

Alabaster es un restaurante de cocina de raíces gallegas, muy conocido en la capital y que para muchos, reúne todas las calidades y cualidades necesarias para recibir el reconocimiento por parte de la guía roja. No ocultaré que el que escribe, se encuentra entre los que suscribe esa opinión.

Propiedad de la familia Garcia, propietaria, a su vez, del restaurante coruñés Alborada (una estrella Michelin), este local supuso el desembarco en la capital del citado grupo, hoy cuentan además de este restaurante con otro más, Anima, y con otro proyecto que vera la luz, según se anuncia, este mismo año. Como curiosidad, y para seguir la estela de la inicial del grupo, los nombres de todos sus establecimientos, comienzan con la letra A.

El establecimiento que hoy nos ocupa, está ubicado en la calle Montalbán, en una zona donde también se ubican otros importantes y muy distinguidos establecimientos, lo cual, y visto su éxito de publico, contribuye a dotar de vida a esta zona noble de la capital.

Ocupa el local donde antaño, estuviera una de las sucursales del Asador el Frontón.

Distribuido en dos áreas: a la derecha, según se entra, un área de barra con algunas mesas, donde se ofrece una cocina más informal, y al fondo, el restaurante propiamente dicho, con salón, espacios reservados y la bodega, acristalada, situada en un lateral del salón principal.

La cocina que se practica en este lugar, es de raíces gallegas, como no podía ser menos, está estructurada en Primeros marineros, Primeros campesinos, de la Lonja gallega, de la Tierra y postres, además de algunas propuestas fuera de carta.

Y para completar y hacer más atractiva su oferta global, al frente de la sala y de la bodega, se encuentran dos jóvenes realidades de la restauración, con amplio bagaje sobre sus espaldas: Fran Ramirez (ex la Terraza del Casino) y Oscar Marcos (ex Piñera o Lúa) ambos figuras, conocidas, reconocidas por la afición y con numerosos e importantes premios que avalan sus trayectorias. Y si junto con estas dos figuras, encuentras un equipo de sala muy dispuesto, atento y cordial, pues el resultado es una sala de mucha altura.

Como parte de su actividad, hay que resaltar la más que interesante oferta vinícola, variada y con precios razonables, a pesar de lo cual es oportuno pedir opinión a cualquiera de las dos figuras o incluso pedirles un maridaje, seguro que te va a gustar.

Sin embargo y por esta visita, hemos ido derechos a por un Las Moradas de San Martin, Albillo Real del 2015, blanco, uva albillo, sin duda un muy buen vino que ha gustado.

Y sin mas preámbulos...

- Brandada de bacalao con pieles de bacalao crujientes. Comienzo típico en los últimos tiempos. Sabrosa brandada. Buen comienzo.

- Tosta de sardina ahumada con queso de Arzua, tomate y cebolleta. Un clásico de la casa, muy del gusto de la clientela. Perfectamente desespinada, gordita y con sabor a mar, gusta hasta a los no sardineros.

- Ensalada de buey de mar. Plato fuera de carta, sobre una crema de habitas, se deposita la ensalada. Se acompaña de una espuma hecha con los corales del buey de mar. Buen plato.

- Alcachofas guisadas con berberechos. Buena presentación, pero no nos ha dicho nada el plato, cada componente, individualmente, muy bien, pero en conjunto no le hemos cogido el punto.

- Colmenillas, espárragos salvajes, tirabeques, crema de vermut y ralladura de anacardos. Platazo, directamente. Para repetir y recomendar.

- Merluza de pincho, pil pil cítrico y espinacas guisadas. Plato de referencia, en carta desde su apertura. Es una merluza cocinada al vapor a baja temperatura, con un pil pil de lima y limón, en cuyo centro hay una salsa elaborada con ponzu y finalmente se acompaña con un guiso de espinacas.Un plato continuamente demandado por la clientela, rara es la mesa donde, al menos, alguno de sus ocupantes no solicite este plato. Es un platazo, igualmente para repetir y recomendar.

- Presa ibérica y fritura cremosa de apionabo. Tierna y jugosa y buen contrapunto con el apionabo, por cierto, servido con un aspecto muy similar a una croqueta con su interior semi liquido. Curioso y muy bueno.

- Torrija de pan de brioche, con haba tonka, garrapiñado de almendras y helado de coco. Perfecto de ejecución y muy sabroso.

- Pannacotta de café, crujiente de café y pistacho, sopa de crema de orujo y tulipa de frutos secos. Bonito estéticamente, fresco, rico, pero la crema de orujo tenía poco sabor.

Café con hielo y té rojo, para acompañar los Petits fours, suponen el cierre a esta nueva visita, y ya van ..... Como siempre, una muy buena experiencia y la alegría de ver que pasa el tiempo y siguen ofreciendo un producto y un trato de mucha calidad, además de constatar que cuentan con el beneplácito de la afición, que llena sus salas.

Reseña completa y fotos en https://comercongusto.es/alabaster/

Recomendado por 2 usuarios
  1. #1

    Imperial Vs72

    El sábado estuvimos en una de nuestras catas en uno de los reservados, siempre es un placer comer en esta casa y el servicio es impecable, todo facilidades y amabilidad

  2. #2

    Jose Luis Gracia

    en respuesta a Imperial Vs72
    Ver mensaje de Imperial Vs72

    En efecto, es un sitio muy "seguro". Por cocina y sala es un lugar muy destacable.

    Saludos.

  3. #3

    JaviValencia

    Hará un año fuimos a comer varios foreros y salimos encantados!!!

Cookies en verema.com

Utilizamos cookies propias y de terceros con finalidades analíticas y para mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias a partir de tus hábitos de navegación y tu perfil. Puedes configurar o rechazar las cookies haciendo click en “Configuración de cookies”. También puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “Aceptar”. Para más información puedes visitar nuestra Ver política de cookies.

Aceptar