Acudimos ante los varios intentos fallidos en Malkebien y al estar cerca de casa no lo dudamos.
Optamos por el Menú , compuesto por 2 entrantes, 1 Pescado o 1 Carne y 1 arroz del día, 1 bebida, café y postre.
Empezamos con cervecitas las cuales acompañamos con unas aceitunas negras marcidas ricas ricas.
Servidas en un tarrito de cristal como los que se utilizan para hacer las conservas ."Muy original".
1er Entrante: Tocino de cielo con sepia sucia. Textura y sabor exquisito, servido en una latina de conserva , tb muy original.
2 Entrante: Canelones de piña rellenos de foie y estas , plato templado, contraste de sabores muy acertado una delicia.
Atún Rojo con Pil Pil de especias, sorprendentemente jugoso y en su punto perfecto, sabor exquisito, acompañado de unas almejas. Para mí el mejor plato de la comida.
Arroz meloso de pato, setas y orejones con frutos secos, combinación de sabores un poco arriesgada, para mi gusto demasiados ingredientes en tan poco espacio. No estaba mal, para mi el plato más flojo de todos.
Pero no dejo de reconocer que me sorprendió ese conjunto de sabores.
Que quede claro que en ningún momento digo que no estuviera bueno, simplemente no me fascinó.
Postre: Bavarois de limón sobre lecho de frutos rojos y tejas de cardamomo servido en un tarro de cristal de yoghurt muy original.
Espectacular. De nuevo sorpresa total, perfecto cremoso y acidez aportada por los frutos rojos en su justa medida.
Buen colofón para un Gran Menú.
Tomamos una botella de Riesling, Diel Nahesteiner, no lo conocía y la verdad que nos gusto muchísimo.
El servicio del vino bastante mejorable, pero bueno no va a estropear en absoluto la comida.
Cafés y Copa de Ron Santa Teresa 1796, me encanta este Ron.
Servicio de sala muy correcto, destacando la Amabilidad y saber hacer de Alfonso.
Un Auténtico placer.
Volveremos seguro.