Mucho más oscuro que otros mugas de otros años. Picota oscuro.

En cuanto te llevas el vino a la nariz percibes que, efectivamente, el vino ha cambiado de registro. ¿Cambio de estilo? ¿Cambio climático? No lo se, pero donde se percibían antes frutas rojas y toques de rioja más o menos clásico ahora tenemos fruta negra, madera nueva sin pulir y taninos vivos.

En boca predomina el alcohol - 14 grados y no 13 como indica la ficha - y las sensaciones maderosas. Tiene menos acidez y es más pesado que otros años. Necesita tiempo para intentar domarse pero ahora mismo no es lo que este vino era.

En copa rojo cereza picota de capa media. En nariz notas predominantes de ahumados, tostados, fruta roja-negra y madera. En boca es de paso largo, taninos integrados, de nuevo ahumados y tostados asi como la fruta. La madera se percibe pero no molesta pero hay que darle más tiempo, evolucionara bien.

Cata de vinos Muga en Lavinia. Color rojo purpura, deja mucha lágrima. En náriz predominan las notas frutales que se agudizan con el tiempo, envueltas en madera noble. En boca pulida expresión tánica. Vino amplio, carnoso, entra muy fuerte y luego se desvanece.

Rojo picota, capa media, limpieza y claridad. En nariz frutas maduras no demasiado fuertes (fresa), maderas tostadas y regaliz balsámico. En boca poco denso, acidez correcta de buen Rioja, recorrido amplio, buena persistencia y retronasales aceptables.