Y vamos con el último de los vinos de una espectacular comida de 11 tiempos en La Suculenta de Benicasim. Para el postre nos sacaron este moscatel alicantino que reconozco que desconocíamos. Nos lo sacan de su vinoteca a unos 11°C y nos sirven en una copa alta, de cáliz ancho tipo cava.

VISUAL: De color amarillo dorado con reflejos cobrizos, límpido y brillante. De lágrima escasa, densa y lenta (87).

OLFATIVA: En primer término encontramos aromas de fruta escarchada (naranja) junto con fragancias de azahar, bastante cítrico de entrada. Agitamos y desprende notas amieladas y de vainilla junto con unos sutiles recuerdos de frutos secos, como a dátiles y uvas pasas. También hay algo de pastelería, crema inglesa y "coca malfeta". De intensidad media-alta (90).

GUSTATIVA: Buen ataque, denso y dulzón en su paso por boca, de tacto aterciopelado, con el alcohol notorio y eminentemente cítrico, con recuerdos a corteza de naranja y cointreau. En retronasal despuntan ciertas notas florales de rosas rojas, mientras que en el post-gusto vuelven las notas dulzonas con gran intensidad, mazapán, vainilla, melocotón en almíbar y miel de azahar, persistiendo algo más de tres minutos en boca. Una maravilla en boca, sabroso, elegante y equilibrado (91).

La RCP la considero buena. La botella de 37.5 cls cuesta unos 14 euros en tiendas.

MARIDAJE: Como estábamos absolutamente llenos tras los 10 exquisitos pasos, le rogamos al chef que nos sacara tan solo un postre y fue un flan de yemas con bolitas de cacao trufado y chantilly de macadamia. Impresionante ágape, gran final con nuestro moscatel alicantino, tremendo e inolvidable disfrute de cuatro buenos amigos, para repetir pronto, en cuanto se pueda coincidir vamos... ):

Salud-os!!