Otro de los clásicos de la capital maña, en este caso en el popular barrio de las Delicias. Aun mantiene su sabor tradicional, incluída una pequeña barrita en la calle, que en verano era dificil encontar sitio, y que con la nueva ley antitabaco, va a tener uso todo el año. En la propia fábrica de La Zaragozana (cerveza Ámbar) se le rinde homenaje al sitio, con bastante más de medio siglo de historia.

La comida con altibajos, aunque todo ello al menos decente, bravas, frituras variada, calamares, berberechos al vapor, platos de toda la vida. Especial mención a las salmueras y a las madejas. Por 12-15 € por barba salimos completamente comidos y bebidos.