El sábado comimos en Maguro-ya y nos llevamos una agradable sorpresa. Por fin se puede tomar comida japonesa en Alicante. Hasta ahora existín restaurantes asioticos que ofrecían algunos platos japoneses.
La tempura riquísima, de las mejores que he probado. Todo el repertorio de pescados crudos, sushi, sashimi y niguiri de buena calidad.
Posteriormente tomamos varios platos de carnes, tacos de ternera con nodles, riquísimos, pollo yakitory, excelente y el famoso kobe japonés, también rico.
La oferta de la carta es muy variada y amplia.
Todo ello con un buen vino y varias cervezas sapporo.
Postre diversos para probar de todo un poco y el sake que no faltara.
Los precios los de un japonés, que nadie espere los de un chino, no tiene nada que ver. Y para un "japo" los precios están ajustados y todo muy correcto.
Voveremos sin duda
Fuimos a cenar. Para ser un miercoles habia "ambientillo" (está en una zona vacacional-residencial y eso se notaba: familias y gente mayor).
Se trata de un pequeño restaurante japonés con terraza "zen" pretendidamente original pero que nos consta que forma parte del atrezzo de una franquicia (puede verse en la web y en sus flayers).
La carta se centra en el sushi -en todas sus variedades: maki, nigiri y sashimi-. No se olvidan de recordarte que el cocinero es autentico japonés. La presentación de la materia prima en la barra no es del todo atractiva (sería un aspecto a mejorar)considerando que hay que vender pescado crudo y tiene que entrar por los ojos.
No hay fideos ni arroz (en ninguna de sus variantes conocidas).
Comida:
Pedimos un combinado de maki y nigiri. Nuestra primera sorpresa es que el precio varia cada día (tal y como nos dijeron) según "mercado". Poco comprensible teniendo en cuenta el elevado precio por pieza que ya concede generosos márgenes de beneficio.Así pues, la carta que presentan en la puerta no mantiene los precios correctos: nos dan unas fotocopias a color de la misma carta pero con distintos precios (todos al alza). Nos parece muy caro: combinado de 12 piezas (6+6 de las mencionadas) 26 euros. Cada pieza extra de sashimi en torno a una media de 2,5 €. Añadimos 6 por probarlas.
El arroz está un poco "pastoso" y el pescado, que no hay duda de que sea fresco, sin embargo no es sabroso. Es francamente mejorable la presentacion y la elaboración.
A parte pedimos una tempura (correcta) y dos cervezas japonesas (Sapporo).
El servicio correcto y solicito.
En total una frugal comida por 30 euros cada comensal.
No creo que volvamos.