El restaurante Salmantice se encuentra situado muy cerca del Hotel Elba, en una calle paralela a Avda. del Mediterráneo con fácil aparcamiento por la zona en un edificio de reciente construcción. El local es muy moderno, luminoso, de amplio ventanal a su entrada siendo la decoración del mismo esmerada y equilibrada, aunque encuentro algo reducidos los espacios entre mesas al tratarse de un lugar con pequeñas dimensiones (lo cual también lo hace acogedor…). Mesas y sillas a juego con la decoración en general, velas encendidas sobre la mesa que acompañan bien a una cena, mantel y cubiertos individuales de exquisito gusto así como cristalería – copas, vasos - perfectas.
Tras unos pequeños aperitivos de bienvenida decidimos probar las berenjenas con miel de caña, muy ricas de excelente corte, así como las croquetas de buey caseras -tamaño considerable- y una ensaladita con boletus de excelente factura, color y sabor. El bacalao de Islandia (una de las especialidades de la casa) era magnífico, servido en su punto para continuar con una pierna de cabrito al horno bien cocinada, regado todo ello con un Pago de los Capellanes oxigenado, servido en decantador e impecable sabor. Postres muy diversos, café bueno y carta de vinos que, sin ser muy amplia, está bien surtida. El servicio es muy profesional, atento, esmerado, sin prisas, correcto con el cliente, nada agobiante y diría que perfecto.
En definitiva restaurante muy recomendable de esta ciudad, sobre todo a paladares exquisitos, al que merece la pena volver (lo haré) para así disfrutar de su cocina en mayor amplitud aunque la relación calidad / precio pueda un poco alta para algunos. Salmantice es un gran restaurante a mi juicio.