Cena con amigos de casa y como uno de ellos conoce a la familia propietaria.. allí reservo.Efectivamente ya en la mesa:jamón iberico-bien cortado y de buena calidad-,pantumaca -excelente- y una bandeja de tomate en finas lonchas-correcto-(3 raciones de cada plato para 10 personas).Coquinas (2),Huevos estrelados (2),Callos(2) todo bien .Los platos principales son de elaboración tradicional basados en una "muy buena materia prima"(entre 20 y 25 Euros aproximadamente).Pescados:rape,merluza,lubina,..Carnes:chuletitas de cordero,solomillo,chuletón (en el nefasto plato refractario,...).No tomamos postres,aunque nos trajerón con el cafe algo de picar.Carta de vinos centrada en Rioja y Ribera de Duero. 3 botellas de Arzuaga Cr 2006 (22eur) demasiado cerrado todavía,por lo que optamos por su decantación y un Rva 2004 de la misma bodega (este ya era otra cosa)invitación del restaurante;copas simplemente correctas para como se tarifa el vino.Aproximadamente la mitad tomamos destilados, en mí caso GT de Citadelle+Fever -grata sorpresa- dejaron botellas,tónica y refrescos para repetir (buen detalle).Alguna cervezas y un par de botellas de agua (1L)

Es uno de mis restaurantes preferidos. La comida es excelente siempre y el trato muy cercano.
En cuanto al aparcamiento decir que, aunque es imposible en la zona, disponen de aparcacoches.
Para destacar las coquinas y el salmón ahumado.
La carta de vinos podría ser un poco más amplia y podrían cuidar un poco más la conservación de los mismos.

Restaurante típico madrileño. Fotos de famosos por todas partes. Hay que bajar escaleras para llegar al comedor; no muy grande, estrecho y cuando se llena agobiante. NO hay zona NO fumadores. Afortunadamente bien climatizado.
Servicio simpático y eficiente. Es la primera vez que durante la comida me llaman por mi nombre de pila. Conviene reservar con unas dos semanas de antelación.
La carta tradicional a tope; de la de siempre. Incluye IVA y servicio.
Antes de sentarte, sobre la mesa ya tienes una bandeja con ensalada de tomate, otra con pan y tomate, y un plato de jamón ibérico (ojito que esta tradicíón, aunque opcional, ya cuesta 33€; pero es difícil decirles que se lo lleven con la pinta que tenía).
Comida para tres.
Pedimos: 1 de coquinas, 1 de trigueros, 1 de mollejitas, 3 de huevos estrellados, 1 de callos. De postre un par de torrijas. La verdad es que todo estaba de rechupete, especialmente los trigueros, huevos, callos.
Servicio vino: Carta solo con Riberas y Riojas (lo más moderno, Contino). Precios x 2.5. Pedimos Emilio Moro Cr. 2005 (25€) servido a unos 18º. En 10 minutos ya estaba fuera de temperatura. Copas para salir del paso. Como no había sitio en la mesa, tuve que dejar la botella en el suelo y servirme yo mismo. Cosas del tipismo???.
En la sobremesa te ponen, sin pedir nada, un platito con pastelillos (que por supuesto, y por tradición, te los cobran a 6€).
Precio total: 165.70€.
Notas: Prácticamente imposible aparcar en la zona. Aunque la RCP no es demasiado buena, la comida estuvo muy bien y repetiremos.

Excelente restaurante, me encantó. Me gustó mucho el trato: cercano y atento. Los platos colmaron mis espectativas; los huevos estrellados con patatas, sublimes; la ensalada de tomate, esplendida. De postre pedí frambuesas con nata, estaban riquísimas.

Desde mi punto de vista, uno de los mejores restaurantes de Madrid. Comida tradicional con muy buenos ingredientes. Coincido con el comentario anterior en las excelencias del jamón y del tomate que te ponen de entrantes. Buenas verduras, excelentes callos y torreznos y muy aceptables huevos estrellados.
Las carnes y pescados son de muy buena calidad.
En cuanto a los vinos, la carta es bastante amplia aunque los precios son un poco elevados.
Para no perderse.

Restaurante de comida clásica decorado en madera y muy frecuentado por gente del mundo del espectáculo. Buenos entrantes a base de un jamón exquisito y un tomate, y eso q no soy muy tomatero, que quitaba el sentido. A continuación recomiendo pedir los huevos estrellados q Lucio hizo tan famosos, y q aqui (creo q algún familiar lo dirige) los bordan. También tienen buenas verduras por lo q se pudo ver.
De segundo, tanto carnes como pescados son impresionantes. La merluza a la plancha está exquisita, y la lubina no se le queda atrás. Buen chuletón, callos, cordero.
En los postres tampoco hay complicaciones: natillas, flan, arroz con leche, tartas de la casa (muy rica la milhojas....)
En el vino, las copas dejaban un poco de desear para la categoría de precios del restaurante, y la carta es algo corta, tendiendo mucho hacia los Riojas. El servicio del vino fue correcto, como en general, el del resto de la comida.
Un sitio con una gran materia prima, con precios algo elevados (precio m