Restaurante perfectamente descrito por el compañero que me precede, con cuya crónica nos descubre un establecimiento muy interesante por su cocina y precios. Su visita era por tanto obligada, de ahí que en esta escapada de fin de semana a la capital salmantina nos hayamos acercado a comer sin tener que pensárnoslo mucho. Llamamos de víspera para reservar, y bien que hicimos dado que el local acabó llenándose.
En su carta encontramos variadas propuestas, desde tapas a raciones, incluyendo también varios menús degustación. En nuestro caso (el de mi pareja y el mío) nos decantamos por uno de ellos, yéndose mis hijas y la amiga que las acompañaba a la opción de raciones y tapas.
El menú elegido (27€) incluía lo siguiente, servido todo ello en pequeñas raciones:
- Pechuga escabechada con verduritas
- Rulo de foie con jamón de pato, pasas, piñones y reducción de vino
- Ensalada de patata, boquerones, tapenade y espuma de ajoblanco
- Croquetas de boletus con cebollita frita
- Dorada rellena de puerros, setas y jamón con donostiarra y ajo tostado
- Solomillo de ternera con patatas panaderas
- Trufón de chocolate y helado de arroz con leche
Analizado en conjunto se trata de un buen menú, contando con platos muy logrados, como la pechuga escabechada o el postre de chocolate, estando los demás en un nivel algo más bajo, pero siempre pasando del correcto. Si tenemos en cuenta el precio nos encontramos con una propuesta con una R.C.P. desde luego inusual y muy difícil de igualar. Si además añado que en los 27€ se incluye también el pan, el agua, el café, el vino (Marqués de Vargas Reserva) y un medio Gin-tonic entonces ya uno se queda sin palabras. Evidentemente poco margen de beneficio puede haber con estos precios, por lo que el mantenimiento de su propuesta, sin entrar en otras consideraciones, pasa obligatoriamente por contar con llenos diarios.
Aunque el menú ya incluía el vino, eche un vistazo a su carta y al ver que contaban con uno que me apetecía probar les propuse la posibilidad de cambiarlo pagando la diferencia. No tuvieron inconveniente en el cambio y al final fue un Pirita tinto 2007 el vino que acompañó al menú. El vino evidentemente no era el más adecuado para un menú degustación, pero no podía dejar pasar la oportunidad de probarlo. Por cierto, aunque su precio en carta era algo superior al que incluía el menú, al final tuvieron el detalle de no cobrarme la diferencia.
En resumen, una más que interesante propuesta para todo aquel que visite Salamanca. No se puede comer mejor con unos precios tan apañados.
Me parece una excelente dirección en Salamanca. La RCP es buenísima y los detalles aun mas.
Un saludo
Joan
Hubiese sido una opción de haberlo conocido antes.
Seguí tus consejos: Visité Viñas del Cámbrico (bonita bodega y singulares vinos) y comimos en Mirasierra (excelente comida tradicional). Visitando Miranda del Castañar, Mogarraz y La Alberca.
También comí en Victor Gutiérrez. Su comida muy bien, el servicio deficiente, escaso y poco profesional, además la oferta en bodega escasa y cara.
Muchas gracias.
No conozco ningún lugar con esta RCP, ni en Salamanca ni en ninguna otra parte. De todas formas el concepto RCP puede a veces ser engañoso, pues en esta ciudad hay restaurantes con mejores cocinas y con unos precios no excesivamente elevados. En ellos vamos a pagar más, pero también vamos a comer mejor.
No te recomendé este local porque no sabía de su existencia.
Ya veo que casi seguisteis al pie de la letra las recomendaciones. Me alegro que te fueran útiles. Los pueblos guapos ¿eh? Una pena lo del Víctor Gutiérrez. Siempre hemos comido bien en ese restaurante y el trato ha sido magnífico. Me tienen un poco mosqueado, pues estuvo hace bien poco un compañero cántabro y también le pareció que el servicio no estaba a la altura. Respecto a los vinos coincido plenamente con lo que dices: pocos y caros.
Saludos
Jope... Si que está bien la RCP, sí. Hombre y con un marqués de vargas y el 1/2 GT, Pues tienes razón. Imabatible.
Saludos!
Desde luego se trata de un menú que en su precio incluye todo aquello que normalmente siempre se acaba pidiendo en un restaurante, pero lo del GT me parece ya rizar el rizo. La calidad de este último era bastante floja, por lo que hubiera sido mejor invertir el costo del mismo en mejorar la calidad del resto del menú. Evidentemente en el rango de precios en el que se mueve la carta de este restaurante el producto utilizado no puede ser de mucho nivel, pero en la cocina desde luego que tienen buena técnica y saben como hacer apetitosos todos sus platos. Con producto fetén lo bordarían.
Me tenía apuntado también El Alquimista, restaurante que tú ya conoces, pero nada más hubo oportunidad de ir a éste. Como voy mucho por Salamanca caerá en la próxima.
Respecto a Lilicook está muy bien para lo que se paga. Te diría que incluso pagando algo más podría seguir considerandose un local con una buena RCP. Su oferta de vinos es cortita, pero bueno, siempre se acaba encontrando alguna cosita de interés, que en este caso fue el Pirita tinto, un vino que tenía ganas de probar y que nunca había encontrado en restaurantes. Por cierto, su precio era de 21€, unos 3€ más caro que el Marqués de Vargas, pero no me cobraron la diferencia, cosa que deja bien a las claras que la atención al cliente es algo que miman en este local.
La verdad es que no se puede pedir más por ese precio. Qué tal con el cambio del vino? Supongo que valdría la pena ...
Me sorprendió positivamente el Pirita, si bien en general me gustan más los vinos menos corpulentos. A este menú seguro que le hubiera ido mejor el rioja que éste, pero bueno, tenía ganas de probarlo y el restaurante me facilitó las cosas..
Como le digo a Sergio muchas veces y él a mí, nos estamos haciendo unos talibanes de la acidez y la finura de cuidado ...
Pues sí, y además no tiene vuelta atrás.
De eso estoy seguro. Cada día que pasa los vinos maderizados y estructurados me "rechinan" más.
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