Visita Bodega Noemi Wines Fuenterrobles (Utiel Requena)

Noemí Arroyo nos espera en la puerta de la bodega “no bajéis del coche porque lo primero que haremos es visitar la viña”, y nos dirige hacia a las viñas de Bobal, a unos cinco minutos en coche, donde nos explica el concepto de este nuevo proyecto en el que se ha embarcado con Raúl Zorita, legatario de estas cepas familiares (su tío Exuperio “el Negro” plantó para Raúl esta Bobal hace más de cincuenta años).

Un proyecto para hacer vinos con alma, que reflejen las condiciones climáticas y de cultivo de cada añada, siguiendo de cerca las cepas y acariciándolas, pidiéndoles lo mejor. Es un proyecto con personalidad y sensibilidad, ligado a la tierra, al paisaje.

Noemi trasmite vitalidad, pasión por lo que hace, nos contagia su amor por el campo, por el vino, por la Bobal, por su tierra. Sabe hacer vinos. Y sabe sacarle lo mejor a sus cepas, "porque cada una es diferente" dice esta fuenterrobleña para la que no hay recetas mágicas ni proyectos inamovibles "porque la añada, la tierra, el clima, nos dirán qué podemos hacer". Ejemplo de que el vino se hace en el campo. El mimo aplicado a la viticultura queda resumido en la vendimia seleccionada directamente en la cepa.

"Quiero transmitir mis ganas de hacer vino en esta tierra rústica y pobre, que es más conocida por sus producciones por kilo-grado y donde los polifenoles son consideramos una variable secundaria".

Me atrevo a deducir de sus palabras que Noemi reivindica la Bobal en botella, con etiqueta, con autores y autoras. Vinos de garaje, con alma. Vinos que se hacen fundamentalmente en el campo y con las mejores técnicas en bodega para sacar la mejor expresión de la añada. En su folleto dicen: “en eso estamos y daremos lo mejor de lo que nos permitan las añadas diferentes en cada cosecha”

Volvemos a la bodega donde hacemos la cata de dos vinos Innato (Vino tinto joven con Bobal y Petit Verdot) y Exuperio Rústico (Bobal con 4 meses de barrica de roble francés) 

Innato es un vino joven, aromático, más complejo en nariz de lo que son otros vinos de sus características, deja un buen recuerdo. Está en su momento óptimo de consumo.

Exuperio Rústico: A la vista se presenta “bien vestido”, color cereza picota violáceo, brillante y con matices carmesí, algo sanguíneo, de capa media alta, en su movimiento la copa queda algo tintada, buenas piernas también ligeramente tintadas. A nariz parada nos da nobles aromas especiados, vainilla, torrefactos muy ligeros y elegantes de las barricas de roble francés con tostado medio. Aromas a frambuesa en sazón cuando mueves el vino en la copa. En boca, ataque vivo, paso alegre, carnoso y sabroso. Taninos amables, en evolución. Posgusto medio con recuerdos agradables a fruta con fondo especiado.

Aún con el posgusto del EXuperio Rústico 2013, me arranco con una propuesta para el Sábado de Gloria del año 2016 "y así hacemos una vertical de las añadas 2013, 2014 y 2015" porque tengo curiosidad por como pegará el estirón en la botella y queremos disfrutarlo junto con las añadas venideras. Una vertical del producto salido de las tierras de Raul Zorita y de las manos y la cabeza de Noemí Arroyo. 
Calidad, equilibrio, autenticidad, singularidad son adjetivos aplicables al proyecto. 

Muchas gracias Noemi y Raúl por esta iniciativa. 

Los de Jaraguas

En la viña

La cata