Evocaciones subjetivas de la segunda fase

Como ya dije en la primera fase, para mí, cada vino puede identificarse con un tipo de persona. No el tipo de persona que beberia cada vino, sino el que sería cada vino si fuera una persona.

He aquí lo que me ha sugerido al cerrar los ojos cada uno de los vinos de la segunda fase, una pura valoración no técnica, sino ";emocional";:

El 7 es un chiquillo feliz y simpático, un poco inexperto todavía, pero que se esfuerza con su cordialidad por hacerse notar
El 8 es un hombre clásico y correcto, cuyas buenas maneras son su mejor cualidad
El 9 una muchacha joven en plena explosión hormonal que permanecerá por siempre en la memoria del afortunado que consiga ser su amante
El 10 es la femina de Virgilio, ";varium et mutabile";, diferente cada día, imprevisible, con la que nunca sabes como acertar.
El 11 es una niño dulce y apacible, a un paso de la tumultuosa adolescencia
El 12 es individuo estirado y antipático que al principio te cae mal, pero que al conocerle se convierte en el gran amigo de tu vida

Por orden: 9, 8, 7, 11, 12, 10

Más difícil de definir, más compleja en general esta fase.

Seguimos jugando un rato más, que por suerte y por desgracia, esto se acaba.