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De: Nacho.
Fecha: 15/06/2001
Hora: 06:08 -0400
Moët Chandon ha fijado su mirada en España. El grupo francés, propietario de las marcas de champán Dom Perignon y Moët Chandon, estudia la compra de una bodega de vinos de alta gama.
Xavier Ybargüengoitia, director general de Moët Hennessy España, reconoce ayer el interés del grupo por crecer en el sector de los vinos de mesa en el décimo encuentro de empresarios de alimentación y bebidas, organizado por el IESE en Barcelona. El primer ejecutivo de la filial española de Moët Chandon aseguró que el grupo tiene una vocación compradora, pero advirtió de que no es fácil encontrar lo que nosostros estamos buscando. La compañía quiere reforzarse con la compra de una bodega que elabore vinos de una altísima calidad y prestigio, en la línea con el resto de sus productos. Actualmente, el precio de una de sus botellas de champán oscila entre 24,04 y 120,2 euros, entre cuatro mil y veinte mil pesetas.
Moët Chandon tiene ya una bodega dedicada a la elaboración de cavas en la comarca catalana del Penedès, desde la que exporta este producto a Japón, Inglaterra y los mercados asiáticos. La filial española obtuvo el año pasado un beneficio neto de 2,63 millones de euros, lo que supone un crecimiento del 112 por ciento respecto al ejercicio anterior. Las ventas se elevaron a 32,08 millones de euros, un once por ciento más.
Ybargüengoitia apuntó que aunque las ventas de champán en España son todavía muy bajas en comparación con otros países, el consumo se ha disparado en los últimos años gracias a la mejora del poder adquisitivo. La cuota de Moët Chandon en nuestro país, el sexto mercado por ventas del grupo, supera ya el setenta por ciento y su previsión es duplicar las ventas en los próximos cinco años. La multinacional alcanzó en 2000 una facturación de 11.600 millones de euros, sorteando la crisis del resto del sector.
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