Vamos con esta cerveza belga, una Strong Amber Ale con un 8.4% de alcohol. Leemos que "recibe su nombre por su creador, Pauwel Kwak, quien fue el primero en elaborarla en 1791 para los cocheros flamencos del siglo XVIII que, en sus descansos, se detenían a probar sus productos en la posada que Pauwel tenía entre Mechelen y Gante. En aquella época, el Código Napoleónico no permitía a los conductores beber cerveza ni bajar del carruaje para saciar su sed. Kwak inventó entonces un vaso que pudiese fijarse al vagón como solución. No obstante,  la cerveza que conocemos hoy, es una receta formulada en 1980 por Brouwerij Bosteels en Buggenhout. Otra anécdota curiosa es que ese vaso especial, resulta tan original y agradable a la vista que más de un cliente se lo ha llevado a casa debajo del abrigo. Para evitarlo, en lugares como la cervecería Dulle Griet han ideado un sistema muy efectivo, que consiste en tener que dar un zapato a cambio de la bebida. Éste permanece en una cesta colgada por encima de las cabezas de los parroquianos hasta que se devuelve el recipiente." Pero vamos a lo nuestro. La sacamos de la nevera y esperamos unos 20 minutos antes de abrirla y proceder con su valoración a 12°C.

VISUAL: Precioso color ambarino en tonalidades ocre con reflejos dorados, muy brillante y con infinidad de rosarios ascendentes. Espuma muy persistente, con una burbuja de tamaño medio (94).

OLFATIVA: Nos vienen notas de fruta roja y con hueso, a fresa y a mermelada de melocotón. Agitamos y encontramos fragancias de miel de azahar, con un puntito dulzón avainillado, como de flan y crema inglesa. También aparece un toque de cereal tostado y lupuloso, junto con un curioso recuerdo de pétalos de rosa y algo de frutos secos (avellanas tostadas). De intensidad media alta (94).

GUSTATIVA: Ohhh... Qué delicia!!, elegante, cremosa, con el carbónico maravillosamente integrado, con increíbles sabores de caramelo y lúpulo entremezclados, brutal en su ataque. Paso por boca muy placentero que transmite equilibrio y corpulencia. Retronasal con notas avainilladas y de canela, mientras que en el post-gusto percibimos de nuevo ese puntito de mermelada de albaricoque, de malteados y de almendra cruda. También hay un atisbo cítrico de corteza de naranja, junto con algún herbáceo, como de hierba seca. Cuerpazo, grado alcohólico presente y sensación final de gran cremosidad al tacto, con notas de caramelo y fruta roja. Excelsa cerveza, una maravilla (95).

La RCP pese a costarnos 2.40 euros el botellín de 33 cls, me parece excelente, los vale.

MARIDAJE: Nos la tomamos con una deliciosa porción de pizza cuatro quesos con salami y alcaparras. Fabuloso maridaje, perfecto entendimiento entre las notas lácticas, cárnicas y salinas de nuestra pizza y el puntito dulzón y malteado de nuestra rica birrita. Qué acierto!!.

VIDEOCATA:  https://youtu.be/tsYloidA0CQ

Salud-os!!

Cerveza muy comercial en Bruselas, donde se bebe en una copa un tanto singular que al beber hace un ruido tipo kwak, de color amarillo ambar con abundante espuma. En nariz tiene unos aromas florales y a lúpulo. En boca, es fresca, pero espesa en su textura, nos sabe a regaliz y algo golosa. Dentro de su comercialidad no esta nada mal.

Marrón oscuro con tonos rojizos, turbia, vivacidad media. Cantidad media de espuma color crema, densa y no demasiado persistente.
Nariz intensa. Panadería, cereales y algo de cítricos.
Boca potente, carnosa, ligeramente anisada, untuosa, viva y con un largo final.
Botella de 33 cl.

Botella serigrafiada de 75 cl. con tapón de corcho : 4,56 €. Cerveza especial de guarda. ...........................................................................................................................................................................................      Cuando nieve y hiele, cuando se les pone la nariz roja, es tiempo de reaccionar. Basta con ir a buscar una botella de Kwak - botella de vidrio oscuro, abombada, que dormita en vuestra bodega - y cocinar un plato de invierno : patatas a la flamenca con panceta, bayas de enebro, un resto de cerveza, perejil y dos cucharadas de nata espesa. La capacidad de la botella es de capital importancia : esta cerveza envejece y madura. En el vaso, mismo color ambarino, misma espuma blanca, cremosa y densa pero más duradera y sabrosa de lo que se cree. Olores más potentes - ron, clavo, dátiles, cáscara de naranja - sabores más complejos - pasas de uva, manzanas acarameladas, especias - placer decuplicado y transfigurado. El frío impone su ley : silencio, buena comida caliente y una gran cerveza, catada al amor del fuego.

     De color ambar cobrizo, presenta una espuma hueso - abundante y consistente - que mancha la nariz y nos dibuja bigotes canosos. Huele a hojas de cilantro estrujadas, a ron viejo y a tierra grasa. En boca, nos da la impresión de que estamos bebiendo una sidra brut y una mousse de regaliz. Opulenta pero sin perder un ápice de elegancia, seduce por su buena cabonatación y su equilibrio entre dulzor y amargor. En aras de la precisión, digamos que hay también una pizca de caramelo líquido y una brizna de almendra chocolateada. ( PVP : 2,25 € )