Hoy vamos con esta cerveza belga, todo un clásico. Leemos como curiosidad que "se creó para conmemorar el final de la Primera Guerra Mundial y en un principio se llamó Victory Ale. Durante una cata para las personalidades locales, uno de los asistentes exclamó “¡Nen echten Duvel!” (“¡Esto es un verdadero diablo!” en flamenco). De esta forma, la cerveza pasó a llamarse Duvel, una elección arriesgada teniendo en cuenta que Flandes en esa época era profundamente católica". Pero vayamos al lío. La sacamos de la nevera, esperamos unos veinte minutos antes de abrirla y procedemos con su valoración a 12°C.

VISUAL: De color amarillo dorado con gran cantidad de carbónico surgiendo desde la base de la copa. Espuma persistente de abundante y fina burbuja. Bonito aspecto, limpio y luminoso (92).

OLFATIVA: En primer término encontramos notas dulzonas de caramelo, vainilla y mazapán. Agitamos y asoman aromas de miel, almendra cruda, levadura y lúpulos. Finalmente nos viene un toquecito de pastelería, a crema inglesa y croissant. Bien de complejidad y de intensidad media-alta (91).

GUSTATIVA: Cremosa de entrada, lo anunciaba la exhuberante cantidad de carbónico, y con el grado alcohólico notorio. Paso por boca marcadamente lupuloso, mientras que en retronasal hay fragancias herbáceas de grama recién cortada. Muy rica, con cuerpo, con un post-gusto marcadamente bitter y con el lúpulo como protagonista desplazando las notas dulzonas. Su aspecto engaña, parece una lager a simple vista, pero de eso nada... Persiste casi dos minutos en boca. Sin ser mi estilo preferido, reconozco que se trata de una cerveza sobresaliente (91).

La RCP la considero muy buena. Nos costó 1.90 euros el botellín de 33 cls.

MARIDAJE: Nos la tomamos con unos montaditos de pitahaya, con arándanos, frambuesas y cuatro quesos: fresco, brie, manchego y parmesano. Excelente maridaje con las notas frutosas y con los apuntes lácticos, exquisita armonía con el puntito bitter y alcohólico de nuestra birrita.

VIDEOCATA:  https://youtu.be/k_anJuZ1gZ8

Salud-os!!

dos años después, me confirman lo indicado en la valoración anterior.

La cerveza es bastante agradable y tiene un buen y fácil beber, la boca dulzona pero con leves amargos que le dan variedad y personalidad y cierta complejidad.

Notable.

Otra de las cervezas que he probado en cervecerías en Bélgica, que me gustó, es sabrosa de color amarillo dorado claro con espuma blanca abundantea. En nariz aromas afrutados y cítricos y notas florales. En boca entra muy buen, a pesar de su graduación, es ligera, dulzona, y con un amargor fino.

Color amarillo limón, reflejos amarillo verdosos, algo turbia con sensación translúcida, con abundante espuma de persistencia media.
En nariz hay aromas de intensidad media a malta, levaduras, frutos secos y algo más en el fondo de notas cítricas.
En boca presenta tiene cuerpo pero no satura msanteniéndose en buen tono, no hay sensaciones alcohólicas intensas a pesar de los grados, hay buena presencia de cereales, es sabrosa, con un final de amargos notables que invita a beber. Correcta persistencia.

Bien equilibrada y sabrosa.

cuantas botellas más, para comprobar el grado de satisfacción que esta cerveza me produce, y como he dicho en la anterior valoración, es una cerveza notable, pero nada más. Es agradable y tiene frescura, buen paso de boca y el final es aspero y un pelin amargoso, a pesar de todo algo agradable.

Se merecería que la calificase con un 9, si costase menos de 1 euro con lo que cuesta, cerca de los 2, aunque la mayoría que he comprado ha sido en ofertas y me salen a 1,30-1,40, no puedo asignarle más de un notable medio.

Rica, gustosa, sabrosa, llena de aromas (cítricos, ahumados y un lúpulo de calidad) y una delicia en boca, tiene todo lo que se le puede pedir a una cerveza. Que tenga consistencia, que sea fresca y que invita a beber, pero además posee un plus, y es su poder gastronómico, una de mis preferidas.

Disfrutada en Amsterdam Café en Málaga.

Color amarillo limón un poco turbia con abundante espuma y bastante duradera.

Aromas de buena intensidad a cereales, frutos secos, frutos blancos y cítricos, toques de levaduras, lúpulo y caramelos.

En boca es bastante fresca y atractiva, tiene buena estructura, cuerpo y desarrollo, buenos recuerdos de lúpulos y con bastante amargor, final un poco aspero pero agradable y sobre todo con gran persistencia.

Una cerveza sobresaliente, pero que no vale lo que cuesta.

Amarilla clarita brillante con ligera turbidez y capa de espuma blanquecina que se resiste a desaparecer.

En nariz es fresca y dulce, me ha recordado a esos batidos que nos hacía mi madre de niños de plátano con naranja en los que a veces también caía alguna galletilla maría... Levaduras, las de la galleta.

En boca es sabrosa, voluminosa y con cierto peso, pero da muestras de agilidad pese a la comentada envergadura.

Buen carbónico y punto salino y amargoso.

Me encantan estas botellas chatonas y rechonchonas.

Cerveza especial belga de alta fermentación que a la vista presenta un color amarillo brillante con apariencia algo turbia. Su espuma blanca es abundante, porosa y de persistencia media.

En nariz no me resulta muy aromática. Sólo recuerdos del cereal fresco y notas de fruta blanca, tal vez pera y albaricoque.

En boca se muestra fresca, con cuerpo medio y abundante carbónico. Notas iniciales de ligero dulzor y buena acidez que abren paso a los amargos con personalidad, elegantes, potentes pero no molestos y persistentes en boca. Su alta graduación no se aprecia apenas en el trago, buen equilibrio!

Botella de 33 cl. de las chatas en vidrio marrón muy oscuro con etiqueta muy sencilla y algo clásica en blanco con letras rojas.

Fácil de encontrar. Su precio 1,75 €.

Me gusta, especialmente por sus amargos, que pese a ser potentes no molestan. Marca la diferencia!

Color amarillo limón con reflejo levemente verdoso, brillante, de aspecto translúcido, genera abundante espuma de persistencia media. 
Aromas de intensidad media a malta, levaduras, notas cítricas y algo de fruto seco. 
En boca presenta una entrada fresca, sabrosa, con un buen cuerpo, densa, carbonatada, dejando un final amargoso suave. Agradable y elegante.
Su graduación no se muestra en boca por el excelente equilibrio que presenta pero tus reflejos la notarán.