Dorado limpio y brillante, burbuja media y abundante.
Con buena intensidad en nariz es un vino que va de menos a más y muestra un estilo barroco y con una buena sucesión de capas. Notas de bollería, flores secas, frutos secos, balsámicos, crema pastelera y frutas blancas bien maduras forman un conjunto muy complejo y siempre atractivo.
En boca muestra su todavía innegable juventud y deja entrever el carácter de un año más maduro siendo de un corte más amplio y vinoso pero siempre compensado por su buena acidez y su delicada integración carbónica. Final de frutas maduras y frutos secos, con una buena persistencia.
Este 98 es quizá el Dom Perignon que más veces hemos catado y lo cierto es que evoluciona con pausa y lentitud y se puede decir que todavía está en fase de crecimiento mostrando ese estilo barroco y clásico de la casa con un toque más reductivo. De los mejores DP de la etapa moderna.

Gran vino sin lugar a dudas. Caro, en mi opinión.

Amarillo dorado, poco intenso; burbuja fina y abundante.

Exceso de contención. Muy elegante, finura por todos los costados; brioche, fruta roja, pastelería, etc … muy equilibrado y armónico.

En boca es excelencia pura. Ligero, con marcadísima acidez, y eterno!!! Estimulación parotídea, sublingual y submaxilar durante medio minuto… se inunda la boca y te pide otro trago. Sabroso.

Vino mítico, de calidad indiscutible, aunque con un perfil que responde más a referente de una élite en busca de símbolos de status que a la alta expresión de la nobleza de sus orígenes.

En cualquier caso, excelente.

-Aspecto: límpido, brillante, cristalino.
-Color: amarillo pajizo con reflejos dorados.
-Copa parada: notas frescas, hinojo, levaduras, mantequilla, balsámicos, alcohol, panadería, bollería, frutas tropicales, melocotón, plátano y piña muy madura.
-Copa agitada: se intensifican los aromas que habían aparecido anteriormente y a parte dejan paso a recuerdos de manzana verde, pera, vainilla, manzanilla, jazmín y demás notas florales se combinan con aromas de frutos secos y especias como la pimenta.
-Boca: -Ataque: potente, fresco y sorprendente.
-Paso: sabroso, equilibrado y elegante.
-Final: muy equilibrado y agradable.
-Burbuja: fina, muy bien integrada y se podría decir casi perfecta.
-Caudalía: muy larga.
-Temperatura: 11º - 13º C.
-Maridajes: ostras, jamón de bellota, tartar de lubina con caviar.
-En conjunto resulta un vino muy aromático, elegante, intenso, persistente, equilibrado, sabroso y estando recién salido de bodega aún puede reposar en botella durante un largo período de tiempo.

Siempre pensé que cada vez que abriera una botella del champagne más famoso a nivel mundial, el Dom Perignon, sería un momento de alegría y disfrute. Ésta vez era la última añada que ha salido a la venta, el 98, y como recientemente mi novia acaba de romper conmigo decidí que si no era con la pareja qué mejor que beberlo con mi mejor amigo. No era una noche feliz y el frío (que personalmente no me gusta), comenzaba a hacer acto de aparición. El caldo, impresionante, muy potente aromáticamente y extremadamente complejo, pero ni las peras, manzanas, piñas, manzanillas, especias, frutos secos, mantequillas, flores, vainillas, levaduras y demás deliciosos aromas consiguieron apartar de mi mente la perfecta música que escapa en forma de olor del cuerpo de una mujer. Me besó el champagne y fue delicioso en todos sus aspectos, equilibrado con una burbuja finísima y perfectamente equilibrada, me cautivó y su recuerdo persistió en mi boca durante un tiempo ilimitado; fue encantador. A falta de la compañía perfecta, pensé en unas ostras, en un buen jamón de bellota o en un tartar de lubina. En conjunto me pareció maravilloso. No acabamos la botella, dejé una copa para ella, que al día siguiente tuve que tragar con angustia. Esteban se fue, me fui a la cama y cayeron, al igual que en la copa del champagne dos lágrimas, una por la ilusión de volver a disfrutar de este vino y otra por la mujer perdida.

Última botella que me quedaba de este magnífico champagne que va evolucionando con elegancia y distinción. Se muestra ahora muy cítrico y mineral en nariz y tremendamente elegante y redondo en boca, donde destaca esa fina acidez y la excelente integración del carbónico.

Este 98 será sin duda un vino de largo recorrido, algo inferior al 96 y levemente superior al 99, siempre en mi opinión. Un excelente champagne que tiene como único y gran pero su precio, que le pone en gran desventaja frente a muchos productos de prestigio de pequeños productores. La fama y el mito tienen siempre un precio.

Color ambar .
Burbuja muy fina.
Aromas a pasteleria,miel,hierba seca.citricos,manzana o compota,almendras y tostados.
En boca untuoso,graso,fresco y con una acidez persistente.
lo unico que defraudo el precio pero aun asi es muy buen champagne

Amarillo dorado con reflejos verdosos.

Tremenda nariz de bollería, fruta blanca madura, casi amarilla como los melocotones.

Fina burbuja, vibrante pero ya integrada.

En boca es goloso, elegante, pero más goloso y amplio. Es un gran champagne. Aunque creo que tiene demasiado dosage, se le nota algo dulzón. Un champagne para impresionar tanto por el continente como por el contenido aunque creo que su valor es menor que su elevado precio. Personalmente prefiero los champagnes de pequeño productor que con menos precio tienen más substancia...

El Sr. Perignon se mostró en copa amarillo dorado con claras inserciones verdosas y con una burbuja media y no muy persistente.
En nariz claras notas de ahumados, rodeadas de pasteleria, así como notas de pera, notas florales, incluso hierba fresca, grafito y citricos y mucha cremosidad.
En boca es fresco, sedoso, floral, de nuevo cremoso, con una acidez equilibradisima, las burbujas perfectamente ensambladas y en general muy , muy elegante.

Color amarillo pajizo con reflejos dorados. Brillante y limpio con mucha burbuja muy muy fina. En nariz muy complejo, frutas blancas, recuerdos florales y elegantes perfumes a bollería y frutos secos ( almendras tostadas ). Magnífica nariz. En boca es redondo, elegante, sutil, cremoso. Ataque fantástico y acidez cuasi-perfecta. Mucha fruta blanca con fuerza. Final maravilloso con una integración excelente del carbónico. vuelven recuerdos muy elegantes de bollería. Se queda cortísimos los 0.75 cl.Bárbaro tanto en precio como en la copa, es lo que tiene la fama (sobre 100 €)

Ansiaba degustar este emblemático champange de altos vuelos mediáticos y la verdad no estuvo a la altura de lo que me esperaba de él.
Los aromas se mostrarón limpios y esbeltos con esas notas de bollería y unas marcadas notas cítricas cremosas y bien definidas, pero....... creo haber probado otras botellas menos caras con las que he disfrutado mucho más.

Tal vez no fuese el momento idoneo pero ese día yo le hubiese quitado el DON y dejado solo en Perignon 1998.

Perdonad los amantes de este espumoso.

Amarillo dorado de reflejos verdosos, burbuja escasa, fina y uniforme. Muy limpio.
Aromas de media intensidad y gran complejidad. Notas florales en inicio, toques de brioche, bollería, frutas blancas como pera o manzana, cítricos como piel de limón, frutos secos, notas minerales, incluso me da algún recuerdo de bolitas de anís. Registros muy cambiantes según tiempo en copa y temperatura.
En boca es cremoso, de excelente acidez y muy persistente. Carbónico perfectamente integrado. Recuerdos finales de fruta madura y albaricoques. Aparecen también notas en boca de mantequillas finas, recuerdos lácteos. Muy vinoso y estructurado en boca ofrece muchas posibilidades en la mesa.
Es el Champagne más famoso del mundo y la fama no se le queda grande. Me resulta asombroso como un vino del que se producen dos millones de botellas puede tener esta calidad. Su precio, alrededor de 100 euros es quizá un poco alto, pero está claro que la fama cuesta… Y hablamos de uno de los grandes mitos del vino mundial. Excelente en cualquier caso.