Vamos a probar uno de los vinos que me ha regalado mi buen amigo Jaime, quien es propietario de la bodega en sociedad y al cual agradezco enormemente el detalle. Abrimos la botella 10 minutos antes de la cata y lo servimos a 12°C.
VISUAL: Tiene un color amarillo verdoso muy pálido y transparente.
OLFATIVA: En nariz presenta aromas frutales de manzana verde y melón, así como unas notas cítricas de corteza de limón. Es de intensidad baja.
GUSTATIVA: Con una acidez media, tiene un paso por boca muy suave y agradable. Se muestra seco, con un retronasal cítrico y un tanto floral, recordando aromas de jazmín y azahar. De persistencia algo corta, de menos de un minuto. Muy fácil de beber.
Es un vino muy fresco, ideal para este verano tan caluroso que estamos teniendo.
La RCP queda en blanco, pues fue un regalo.
Lo maridamos con una ensaladilla rusa, una deliciosa vichyssoise y unas alitas de pollo al horno de mi madre. ¡ Cómo cocinan las madres ! Todo muy fresquito y en perfecta armonía. Gracias Jaime.
Roques Negres blanco
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