¡Qué cura de humildad la de este vino para más de uno en cata a ciegas!

Me gusta cada vez que pruebo este vino, cada vez más. Me parece uno de los mejores sauvignon blanc que se producen en este país, y eso que este 2014 está aún por dar lo mejor de sí mismo. Hoy, de nuevo, me ha vuelto a sorprender a ciegas.

Color pajizo brillante y limpio.
Nariz de buena intensidad con aromas de fruta muy marcados, fruta blanca, pera, melón algo verde, notas florales, algo de calas, de petunias, frutos con hueso como el níspero, el melocotón algo verde, albaricoque...
En boca tiene una acidez excelente, lo mejor de su paso por boca, mezclado con las notas de fruta blanca, con esas puntas de lichis que van y vienen, con esa sensación de jugosidad, de presencia de la fruta. Aparecen ahora unas notas de levadura por vía retronasal, incluso un punto casi lácteo, cremoso y un largo recorrido con un final serio que viene arropado por unas notas amargosas muy ricas.

Lo dicho, este el vino que a más de uno le sacaría los colores y es el vino que yo, a botella vista, algún puntito más le hubiera dado, pero la cata a ciegas es así, siempre tiendes a ser conservador.

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