Producción de 1310 botellas. Fermentación en barricas de castaño de 600 litros durante tres meses y sin batonage de lías.

Amarillo alimonado. Es de un aroma denso donde se aprecian las lías, es meloso, se siente la fruta bien madura. Aroma auvado y a cereal, punto herbal, tracto seco, heno al igual que un fresco aroma a hierba recién cortada. Leve punto floral y a miel, anís, levadura y hollejo. Al tiempo surge un levísimo aroma a hidrocarburos y cáscaras de cítricos secas.

La entrada en boca es redonda surge un golpe cítrico, es agradable, con un alcohol envolvente, conforme lo tienes en la boca va creciendo, se palpan las lías y una rica acidez, integrada y potente, que hace del vino algo más fluido. Hay fruta blanca y de hueso es meloso y paladeante. Curioso, glicérico, mineral con un buen punto seco que lo alarga, dentro del marco de la jugosidad.

Catado por Grupdetast http://grupdetast.com/catas/donde%20dije%20digo%2C%20digo%20diego.html

No es el tipo de Txakoli que me gusta, entiendo la tendencia a asemejar más el txakoli a otros blancos pero pierden la esencia del txakoli y si que veo algunos nuevos que afinando la mantienen, esa acidez ese a punto de estallar el carbónico que este desde luego no lo tiene, muy glicerina, demasiado meloso y floral, buen vino si, pero no me emociona ni como blanco ni menos como txakoli, esto todo desde luego es opinable y es una opinión personal

El vino tiene un color amarillo paja, brillante, y muy atractivo.
En nariz se muestra con intensidad media, ya muestra su complejidad y nos anuncia que estamos ante un muy buen vino blanco. La nariz me parece franca, desprovista de artificios.
Finos aromas de lías, de fruta concentrada, de manzana asada. Es un vino fragante, elegante y persistente en nariz.
En boca crece y se reafirma lo captado en nariz. Es sabroso, tiene buena estructura, complejo y equilibrado. Su acidez está a la altura, sin ser agresiva, dotándole del otro atributo que destaco, la frescura, que baila con esa fruta madura, incluso asada, regalándonos un conjunto armonioso y de calidad.
Y al final nos muestra su persistencia, que agradecemos.
Por último quiero pedir un deseo... que nos volvamos a encontrar y espero que haya madurado y crecido en botella, lo cual sería, aunque esperado, muy de celebrar.

Se dice por ahí que es el mejor txakolí actual... También se dice que se elabora de forma tradicional, a la antigua usanza, pero....a ciegas quién dice que es un Txakolí?. Yo al menos, con mis limitaciones , diría que no y quizás también diría que es un gran vino. Un vino seco, con volumen, glicérico en boca, serio, con un nariz cítrica , pero floral, mielosa, de rosal que sugiere Riesling. Me encantó, que es lo importante

Muy interesante el trabajo que está realizando Roberto Olivan con sus Tentenublo Wines. En este caso trata de recuperar la forma de elaborar txakoli a la antigua usanza. Utiliza unas barricas de castaño de 600L que confieren una personalidad especial a este vino de la D.O. Arabako Txakolina.

Color dorado suave y brillante.
Nariz de buena intensidad con buena presencia de fruta, fruta blanca, algo de pera, de manzana asada, de hierbas aromáticas, un punto de la flor de la manzanilla, notas herbáceas muy frescas y un suave toque tostado, ligero, de fondo, perfilando y matizando pero sin agredir al conjunto de aromas.
En boca es amplio, con una acidez fantástica, un vino amplio que no renuncia a ese paso casi eléctrico de esa acidez tan refrescante. Destaca la estructura y la presencia de la fruta por encima de todo.

Me gusta su estética rompedora, la etiqueta entre moderna y clásica, rompedora con la presentación de estos vinos. Toda una declaración de intenciones. Me molesta el lacre, el dichos lacre :-(