Botella bordelesa estándar. Cápsula con la insignia "Tierra de sabor" (típica de bastantes vinos de Castilla y León). Cierre sintético de color fresa/frambuesa.

Visual: rojo fresa/frambuesa claro, con destellos entre azulados-violáceos y rosa palo, limpio, brillante y con buena lágrima (sobre todo si le dejamos ganar temperatura a 10-12ºC).

Nariz: fruta roja fresca (arándanos, frambuesa, fresa y frutas del bosque), flores violetas, hierbas, sotobosque y tierra húmeda. Buena nariz (incluso a temperaturas bajas).

Boca: entrada fresca, suave, sedosa, con tanino perceptible pero ligero, dulce y suave, acidez media-alta que hace salivar. Paso por boca súper agradable y "peligroso" (es fácil beberse una botella incluso uno solo). Final medio-largo para un rosado, toques sutilmente dulces y con ligeros amargos, herbáceos y flores violetas en retrogusto y retronasal.

Comprado en la carnicería Yusta, en Gumiel de Izán, provincia de Burgos, durante el Encuentro Verema. Me lo recomendaron y no falla (lástima no haber comprado más botellas). Tengo el tinto joven por probar e intentaré ver si puedo conseguir más botellas de estos vinos burgaleses porque mucho nombre no tienen pero están buenísimos (y el precio es de traca).