Vino color amarillo dorado, limpio, brillante y lágrima fina y abundante, final de botella con algo de levadura residual.
En nariz con buena intensisdad, notas de flor amarilla, tostados y algo de frutos secos, contundente y expresiva.
El paso por boca, potente, con cuerpo, largo recorrido, amplia, con volumen, matecosa, sabrosa y final salino. Nivelazo de manzanilla a la altura de las grandes y a un precio absequible, excelente.
Retroansal, floral.
Postgusto, largo y muy bueno.
Color amarillo dorado.
Nariz con notas de salitre,frutos secos,notas vegetales y alguna nota de brea al fondo.
En boca es redonda,viva,salinos,notas ahumadas finas,seca,intensidad media.
Interesante Manzanilla del famoso Pago Balbaina.
Dorada con reflejos algo más oscuros.
La nariz es un ejemplo de lo que son los aromas punzantes en estos tipos de vinos. Los siete años de crianza biológica le imprimen un carácter muy particular y atractivo. Camomila infusionada, levadura madre, miga de pan, ligeros aromas de flores, algas, notas leves de barnices, manzana..Todo un catálogo en definitiva.
Boca con una entrada muy directa y seca. Es rocosa con una textura gruesa que proprciona potencia y gran amplitud.Es sápida larga, no esconde la elegancia ni rehuye la frescura. Es larga y muy seductora.
Botella grande, de 75 cl, no es la típica del Marco. Etiqueta y contaetiqueta grandes, con muy poca información. De todas maneras, lo importante es el contenido:
Amarillo dorado, limpio, claro.
Aromas punzantes, salinos, a yodo, a levaduras, a flores, a almendras...
En boca es fresca, densa, compleja, amarga, rica, grasa, salina y larga...muy larga.
Manzanilla comprada en Sanlucar de Barrameda, con motivo del Encuentro de Foreros. ¡Qué pena haber comprado sólo una!
Amarillo dorado con ribete oro viejo, aspecto brillante y limpio.
Aromas muy limpios de agua de mar, levaduras en flor y almendras saladas al inicio que se entremezclan con notas de algas, manzanilla seca y maderas envinadas sobre apuntes de incienso y caliza.
Su ataque es muy limpio, fresco y con casta, evocando incialmente notas de frutos secos tostados, levaduras del velo, aceituna verde aliñada y algo de curry. A continuación nos trae recuerdos de aguacate maduro, salitre, tiza y toques frescos y definidos de la solera. Tiene un recorrido ligeramente amplio, muy fresco, de acidez elegante y final de boca seductor, muy redondo y con mucha persistencia.
Dorada, con asomos de tonos cobrizos, limpia y brillante.
Nariz fresca, compleja y de buena intensidad, que muestra una gran salinidad, pero que poco a poco va dejando paso a aromas a flores de manzanilla, almendras, toques herbáceos, nueces, resinas, barnices, manzana verde, maderas cubiertas de salitre, bollería.... En fin, un pozo sin fondo.
En boca es potente, redonda, seca, con excelente acidez, con dejes de frutos secos y una pronunciada salinidad que se remarca al final del paso de boca y se mantiene eternamente, acompañada de puntitas de acidez para que no le falte frescura al largo postgusto.
Adquirida en la Taberna der Guerrita, se trata sin duda de una de las mejores manzanillas que hasta la fecha he tomado. Una pena no haber comprado nada más que dos botellas.