Tonschiefer

Entre el GG Felsenberg, mi adorado rincon del Nahe, y este Tonschiefer hay abismos vertiginosos pero qué bien sentir ese vértigo de tangerinas y pomelos y mucho albaricoque maduro con el caracter de esos pagos muy serios. El resto como un riesling debe ser, opulentos.

Cookies en verema.com

Utilizamos cookies propias y de terceros con finalidades analíticas y para mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias a partir de tus hábitos de navegación y tu perfil. Puedes configurar o rechazar las cookies haciendo click en “Configuración de cookies”. También puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “Aceptar”. Para más información puedes visitar nuestra Ver política de cookies.

Aceptar