Restaurante Vinotinto parrilla en Madrid
Restaurante Vinotinto parrilla
País:
España
Provincia:
Localidad:
Zona:
Dirección:
Cód. Postal:
Tipo de cocina:

Añadir vino por copa

Precio desde:
20,00 €
(precio más bajo introducido por un usuario)
Nota de cata PRECIO MEDIO:
29 €
Nota de cata VALORACIÓN MEDIA:
5.0
Servicio del vino SERVICIO DEL VINO
5.0
Comida COMIDA
5.4
Precio medio entorno ENTORNO
5.4
RCP CALIDAD-PRECIO
4.6
Opiniones de Vinotinto parrilla
OPINIONES
5

VINOTINTO está al principio de Jorge Juan, en una zona inmejorable. El restaurante está situado en una entreplanta, decoración en ladrillo visto con pedazos de cajas de vino por las paredes. Decoración un tanto cansina de tan vista en tantos y tantos locales. Carta con pinchos y raciones tipo Lateral, ideal para compartir. 3 personas, pedimos dos pinchos: uno de berenjena con salmorejo, el salmorejo bien pero vino acompañado de dos trozos de berenjena francamente mala, seca y carbonizada; otro pincho de queso de cabra con cebolla caramelizada, servido tipo canapé, pasable. A continuación lomo de bacalao a la brasa con pimiento confitado: textura buena, pero sin apenas sabor, y un trozo de pescado escasísimo para el precio de la ración (17,50 euros). Sepia a la brasa, que llegó fría a la mesa, se lo decimos al camarero, se la lleva y vuelve a venir fría, en fin.. (y por supuesto ni una disculpa). 2 hamburguesas, una normal y otra con foie. También nos resultaron un tanto insulsas, la carne no sabía a nada, ni siquiera la que venía con foie estaba sabrosa. Eso sí, las patatas estaban muy buenas. Todos los platos servidos con la misma guarnición: mezclum de lechugas de bolsa y tomate. De postre una tarta "muerte por chocolate" con helado, que no estaba mal. Para beber un tinto de crianza Martínez Lacuesta, que fue lo mejor de la comida. No nos ha gustado nada, nos ha dado la sensación de que tenían todo precocinado y se limitan a calentarlo y emplatarlo. Servicio malo y seco. A pesar de que dijimos que íbamos a compartir, nos sirvieron todos los platos a la vez tipo chino de barrio. Comedor casi vacío (no me extraña), un domingo a medio día cuatro mesas contando la nuestra. Menos mal que íbamos con un descuento de la Web de reservas y pagamos sólo 60 euros (sin descuento hubiéramos pagado 90). Aun así no merece en absoluto la pena, justo al lado y en el mismo rango de precios, tienes La Moraga, Vi Cool, la taberna Los Gallos, etc., que le dan cien mil vueltas a este sitio en todos los aspectos. No creo que volvamos.

Habiíamos oído hablar de este sitio con bastante buenas críticas, sin embargo no es oro todo lo que reluce.

El sitio esá decorado con lo que parece hoy en día la última tendencia: cajas de vinos recicladas, sillas desparejas, paredes negras con el menú escrito...

La primera impresión fue buena, hasta que nos fijamos en los manteles individuales de plástico sumamente desgastados por el uso,las cartas de cartón malo, las servilletas de papel y en un cerco de vino de una botella, que en el mejor de los casos sería del anterior cliente, esto se podría perdonar en un restaurante de menú del día en la Costa Brava, pero no en un establecimiento de restauración ubicado en calle Jorge Juan.

Esto no fue todo: Con el restaurante vacío el camarero nos puso pegas para usar una tercera silla para dejar nuestras cosas;nos pusieron mala cara por pedir cerveza en lugar de vino; no nos sirvieron pan hasta un rato después de habernos traído la comida y sólo cuando se lo comentamos al jefe de sala; nos retiraron los platos nada más llevarnos el último bocado a la boca; al final nos lanzaron las cartas de postre sobre la mesa denotando una gran habilidad al hacerlo, pero una pésima formación como camareros.

La comida estaba bien, buen género y bien presentado, pero no lo disfrutamos debido a la hostilidad con que nos trataron.

Nuestra experiencia no fue buena, no volveremos y no lo recomendamos

Estoy de acuerdo con los anteriores comentarios. Es un sitio muy bien ubicado en el barrio de Salamanca para picotear algo acompañado de un buen vino. La carta es bastante correcta. Pedimos un Telmo Gaba do Xil (19€).

De platos, parrillada de verduras, entrecot de buey, tortilla de bacalao y pinchos "matrimonio". Correcta elaboración y agradable decoración. Ideal para comidas informales de grupo.

Viaje relampago a Madrid y cena de urgencia.

Como no habia mucho tiempo ni ganas son sentamos en la terraza. Unas cañas y un Arroyo para beber y un poco de ensaladilla rusa,correcta y unos calamares de campo, usease unos finos aros de cebolla y pimiento verde fritos en tempura, agradables.

4 hamburguesas varias a unos 15 euros, con punto correcto pero nada que ilusionara.

Ni postres ni cafés.

Para una cosa rapida y con familia puede valer.

Restaurante con una ubicación excepcional, a escaso metros de la Plaza de Colón, con dos alturas y terraza. Lo visité precisamente el día de la puesta de largo de Serrano, con lo que el ambiente era extremadamente festivo.
Centrado en tapas, pinchos, platos sencillos pero con buena materia prima y destellos de originalidad y vinos, comerciales, al uso, pero que no decepcionan. Posibilidad de tomarlos por copas.
Comí paseando mi soledad unas tostas de cangrejo (bien de precio para lo que eran...), una ración de mini-hamburguesas de buey (buena materia prima para el colmo de la sencillez) y una sepia a la brasa, bien escogida y bien tratada.
La comida fue acompañada por Mosen, verdejo, que no fue santo de mi devoción. Y cerré con café.
En líneas generales, no está nada mal, y sería recomendable para familias con niños, para ir iniciándolos poco a poco en estas lides, o para personas ahitas de comidas sencillas bien resueltas.
Buena RCP.

Cookies en verema.com

Utilizamos cookies propias y de terceros con finalidades analíticas y para mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias a partir de tus hábitos de navegación y tu perfil. Puedes configurar o rechazar las cookies haciendo click en “Configuración de cookies”. También puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “Aceptar”. Para más información puedes visitar nuestra Ver política de cookies.

Aceptar