Aunque fueron tres las cenas dado que pernoctamos 3 noches en este cómodo hotel a la entrada de la población de Fermoselle, solo detallaré una de ellas (la más copiosa), aunque confirmando un nivel gastronómico más que aceptable (con algunas sombras), máxime si se tienen en cuenta los precios.

Comedor amplio, con chimenea y con suficiente separación entre las mesas. Éstas vestidas con sencillez y cristalería muy justita para el cariño que le tienen al vino en esta casa. Servicio acogedor y eficiente, especialmente por parte de la simpatiquísima propietaria.

Carta con productos (embutidos, huerta y carnes) y platos tradicionales de la zona sin complicaciones.

De aperitivo suelen poner o un poquito de chorizo o picadillo del pueblo (muy rico).

Cena para tres:

De entrantes:

- Croquetas de pollo: Seis piezas muy hermosas y muy buenas de sabor, con la bechamel cremosa.
- Revuelto de setas y gambas: Generosa y sabrosa ración, bien presentada y con setas de diversos tipos.
- Verduras de la huerta a la parrilla: Amplio surtido de verduras pero en algún caso demasiado hechas (las rodajas de berenjena deshechas). Mejor el tomate o la cebolla.

De segundo:

- Chuletón de ternera sayaguesa: Pieza de buen tamaño pero de escasa calidad (fibrosa). Flaco favor a la ganadería de la zona.
- Callos a la sayaguesa: Muy ricos, esta vez si este plato, aromatizado con hierbas que le dan un toque original. Sin duda, lo mejor de todo lo probado en esos días.
- Presa de ibérico: De nuevo generosísima ración, bien hecha y sabrosa.

Postres:

- Flan de queso (dos raciones): Casero muy rico, servido en una copa con un fondo de ¿natillas?.
- Arroz con leche: Casero también, aceptable sabor pero con el arroz un pelín entero.

Carta de vinos con ciertas inquietudes, aunque bastante corta y con precios en el x1.5. Sin duda lo mejor es la oferta de vinos de Zamora (Toro y Arribes) y de la Ribera del Duero. Los vinos bien conservados en armario climatizado. Pedimos Paraje de los Bancales 2009, vino de autor hecho con Juan García (15€ + IVA), servido perfecto de temperatura pero en copas solo aceptables. Servicio que consiste en el descorche únicamente.

En la sobremesa, como detalle de la casa, un prescindible licor de hierbas y un riquísimo periquillo típico de Fermoselle (una dulce redondeado y frito, hecho con huevos, harina, aceite, anís y azúcar).

Precio total: 94.30€ (inc. IVA, panecillo a 1.20€ por persona, una botella de agua de 1l a 2.20€ y vino).

Nota: El precio por persona indicado es lo que estimo que costaría comer en este local con IVA y sin bebidas.

Restaurante del hotel donde nos alojamos y en el que cenamos dos veces. Trato muy amable y cercano.
Salon amplio, decoracion que mezcla colores suaves con paredes de granito, una gran chimenea preside la sala (aunque no se utiliza ), mesas amplias, bien vestidas y con buena separacion, cristaleria y vajilla correctas.
Carta no muy amplia centrada en productos de la region.
La primera noche cenamos:
Un aperitivo de chorizo a la brasa mientras elegiamos.
Ensalada de canonigos, con queso de cabra y papada iberica, correcta y de segundos solomillo con foie, de inmenso tamaño, gran sabor y calidad de la carne asi como del foie, acompañado de una salsa semidulce, champiñones al ajillo, patatas fritas y verduritas salteadas
y chuleton a la brasa, de tamaño medio, excelente carne de gran sabor aunque un pelin hecho para mi gusto, con el mismo acompañamiento que el solomillo.
De postre unas natillas, correctas y un arroz con leche, espectacular, nada que envidiar a los mejores de Asturias, acompañados de orujo de hierbas casero, invitacion de la casa.
La carta de vinos es bastante escueta, centrada en vinos de la zona y de las denominacines cercanas, algun Rioja y algun espumoso, precios muy contenidos, nos decidimos el primer dia por un Condado de Fermosel Transitium Durii 05 y el segundo por un Terrazgo 07, servidos correctamente.
Terminamos con unos Gts de Befeater 24.
Excelente opcion en la zona, las dos noches estaba el comedor lleno.

Justo en la entrada de Fermoselle esta esta hosteria que lleva poco mas de un año de funcionamiento.Decoracion y entorno muy comodo y agradable mezclando lo tradicional con lo medernoComida buena,con muy buena materia prima ya que ellos tienen una carniceria en el pueblo y la ganaderia por lo que me dijeron es propia.Comimos dos entrantes,dos segundos(muy rica ternera sayaguesa),postre y el vino del que no se le trata mal tanto en los precios como en la temperatura por 50€ en total.Recomendable.