He visitado este restaurante, y la verdad, no es para dejar de comer en él, es más, es mejor visitarlo, preparan el marisco como los angeles, el pescado, con una variedad impresionante, te hace estar en los cielos de los mares, las carnes hecha a la brasa de carbón ¡uuunn,... Que aroma más rico!, y los platos por su preparación tan sencilla y bonita que te dice... Comeme, comeme, deja al paso un aroma del buen hacer, la verdad es que es muy animado, acogedor, como en casa, con su terraza y todo, hasta con su fresquito, la sal esta situado en una plaza en el centro de la ciudad, ¿y de precios? Normalicos, relación calidad precio, ni caro, ni barato. Lo recomiendo de corazón, si visita isla Cristina y no comes en este restaurante, seguro que te vas arrepentir, pero puede que lo hagas después de mi consejo. Un saludo espero que valga mi opinión.

Nuevas visitas, en este año en dos ocasiones, en nuestra estancia en el mes de junio por la costa de Huelva, junto a la frontera portuguesa.

Como el anterior comentario, las mesas se encuentran debidamente separadas y bien vestidas.

En las dos visitas cinco comensales, hemos disfrutado de productos típicos de la zona con predominio de pescados.

Siendo de destacar, las coquinas y almejas que este año no sólo tenían un punto, sino quizás, punto y medio a dos puntos, por encima de las demostradas en otros locales de la zona.

Las castañuelas de mar, las albóndigas de Choco, las croquetas de la casa, e incluso rodaballo salvaje excelente (eso sí, a precio de pescados de ese origen en el que predomina la calidad sobre el precio).

No me puedo olvidar, de un buen jamón e incluso de una sopa de rape que cumplió con creces todas las expectativas fundadas sobre ella.

Este año se ha apreciado una mejoría evidente en su carta de vinos, con buena presentación, tanto agradable, como funcional y con la presencia de blancos, cavas, rosados y tintos de varias denominaciones de origen de nuestro país, e incluso algún guiño a denominaciones de origen en tintos, como Chile.

El precio del vino el general ajustado y el servicio cumpliendo bien.

A aparte de las clásicas cervezas, estos años nos decantamos por José Pariente verdejo y Godello Louro do Bolo.

Los precios de la carta con muy buena relación calidad precio, salvo en los precios en los pescados extractivos que he comentado previamente, no tienen precio sino sólo apreciación de calidad y excepcionalidad.

Ya lo observe en el año pasado y en este lo he constatado, la diferencia dentro de un nivel medio a medio alto del servicio, en el primer día fue excelente y en el segundo fue de tipo medio a medio-alto apreciando entre cansancio (domingo noche) en el personal o quizás cierto desborde en la cantidad de personal mesa en el segundo día, si acudís espero que os toque el primer día...

He visitado este restaurante el pasado Agosto,recomendado por unos amigos.
Para los que conozcan Isla,está en la Pza de las Flores,en lo que era el antiguo restaurantes Reyes,ha sido totalmente renovado y presenta un salón interior sumamente confortable y apartado del bullicio de la plaza.
El maitre que nos atendió formidable,nos aconsejó estupendamente ,empezando por unas "castañuelas" (choquitos o chopitos,le dicen según la zona de España,pero de tamaño mínimo) espectaculares,con un golpe de plancha nada mas,fresquísimas,hacía tiempo que no las tomaba pq es muy dificil encontrarlas.
Tomamos también de entrante un atún mechado que hacen en una especie de escabeche a baja temperatura con varias especias (tiene curry) ,es un bocado exquisito que no deben dejar de pedir en este establecimiento.
De plato fuerte pedimos varios pescados al horno,yo me tomé una ventresca de atún (soy atunero 100% y no comer atún en Isla es un crimen,ya que es el mejor de España sin duda,mejor que el del estrecho),y ahí tengo un pero ,estaba con un exceso de sabor a ahumado,como pasada de horno,aunque la materia prima era de lujo.
Lo que pidieron los demás amigos que ibamos (dorada,lubina,etc..) estaba excelente también.
Las guarniciones un poco monótonas (todo lo sirven con unas patatas panaderas y verduras al horno).
Estabamos tan llenos que no pedimos postre,pero el camarero nos sirvió unos bombones helados con un chupito de Limoncello (nos dejó la botella en la mesa para que nos despacharamos a gusto) y sin meterlo en la cuenta,detalle que en pocos sitios se ven hoy en día.
Todo un lujo de cena,y a unos precios tranquilizadores...
Isla Cristina,que hermosa eres
como una perla que brilla en el mar...

Por tercer año consecutivo, visito durante el mes de junio este restaurante (el primer año en su antigua ubicación en la calle del Carmen) y los tres años he repetido las visitas en más de una ocasión por año.

Local amplio, servicio atento y con ganas de agradar y asesorar.

En este local los platos del mar de la zona (coquinas, acedias, puntillas, pescados, etc.) tienen un punto por encima del resto de los restaurantes de la zona.

Aceptable carta de vinos con servicio adecuado.

Muy buena relación calidad precio.

Recomendable

Realmente recomendable, buena materia prima y sencilla pero buena ejecución tanto de carnes como pescados, además de buenos tomates y excelentes conservas ( puntas de esparragos impresionantes). carta de vinos muy correcta con referencias interesantes de denominaciones nacionales, buenas copas y servicio muy atento a pesar de visitarlos en pleno agosto.

Excelente Restaurante en la parte mas bonita de Isla Cristina. Eramos 14 de 12 nacionalidades distintas... Quien podria imaginar que ibamos a salir todos contentos y que el servicio no se resintión en lo mas mínimo a pesar de todos los que eramos y que mas de la mitad no entiende español. Pedimos varios entrantes de mariscos, todos en su punto de vapor o fritura. Luego las lubinas, corvinas y demás fueron el deleite. Hay quienes prefirieron carne vacuna y tampoco se fueron defraudados. Finalmente un surtido de postres donde no faltó un exisito tocino del cielo. De vinos había una carta muy completa, ordenada y con precios muy buenos. Se hechaba de menos algún vino extranjero. Pedimos un correcto Gran Bazán Verde y un excelente Sierra Cantabria "joven" 2005 que todos sabemos que tiene barrica. Las copas y el servicio del vino excelente, todos a su correcta temperatura.