Cena de domingo por la noche en pareja. Salen a recibirnos a la puerta al vernos ojear el menú. Nos intriga el buffet servido a la mesa a un precio más que razonable, 14,95€ (IVA no incluído y sin bebidas). El local es agradable, sobrio, iluminación correcta. Nos dejan elegir mesa al estar prácticamente vacío. El primer problema: las mesas para dos son excesivamente pequeñas. Elegimos adentrarnos un poco para no quedarnos a la puerta y nos situamos cerca de la cocina.

El servicio es el punto más débil de este establecimiento, ya que antes de sentarnos ya nos estaban requiriendo qué íbamos a beber. Lo atribuyo a la escasa experiencia de ambos, un chico y una chica japoneses con escaso dominio del castellano. Pedimos la carta de vino que, sorprendentemente, está bastante completita para tratarse de un establecimiento de este tipo. Con referencias básicas, pero seguras. Correcta, nada fuera de lo normal, pero sobresaliente respecto a la media de los restaurantes de “su liga”. El gran fallo, los espumosos… dada la comida que predominantemente sirven. Ante tal panorama decidimos por algo suavecito, agua y un Marina Alta y he aquí el segundo problema: Servicio nefasto o nulo, lo dejo a vuestra elección. Es una lástima, ya que las copas también son de una calidad superior a la de la media de estos establecimientos. Pero el vino, fuera de temperatura (servido en champañera, eso sí, hasta el tercer servicio no alcanzaría la ideal) y su servicio, pues eso, el chavalito pasó un trago por tener que abrirla delante nuestra y hubiera preferido que no lo sirviera en las copas.

Respecto a la comida: En general, bastante buena. El sushi es de buena calidad, no espectacular, pero bastante logrado, aunque las proporciones de arroz y el resto de ingredientes en los “makis” están algo desproporcionadas. A destacar: Positivo; el sushi de pez mantequilla; maki california; Negativo; temakis, tanto de atún como de salmón.

Pedimos también una ensalada de algas muy rica. Las empanadillas al vapor, sin duda, lo mejor de la noche, rollito de pato, muy bueno, “mini rollitos fritos”, bastante buenos, también, arroz especial, bueno, sin más, tempura de verduras, bastante mala, exceso de aceite, trozos muy gordos y ternera crujiente picante, bastante decepcionante (básicamente el cerdo agridulce habitual, pero con ternera).

Cuando empiezas a ojear la carta, ves mucha variedad de platos, pero, claro, son todos básicamente lo mismo con pequeñas modificaciones lo que hace que no repitas excesivamente muchas cosas. El atractivo principal, sin duda, es el sushi. Ya digo, bien, pero no para tirar cohetes, no mucho mejor que el puedes encontrar en un “Wok” de barrio.

En cuanto al servicio, como ya dije, inexperto, pero voluntarioso y algo torpón. Se equivocaron varias veces en nuestras notas, nos dejaron un plato que no era nuestro y confundieron un plato que pedimos. En su descargo, he de decir que se disculparon, a su manera, de inmediato. Cuando fue entrando algo más de gente la elección de mesa cerca de cocina se hizo algo equivocada, mucho escándalo que contrasta con el ambiente relajado de la sala.

Postre no tomamos ya que, pese a estar incluído en el menú, las opciones eran paupérrimas. Tomamos dos cafés.

La vo

Precio: 46,86€ No está mal y si decides optar por cerveza en vez de vino (tal vez una opción más acertada) el precio aun sea más bajo, todo está en tu mano, claro.

En general, pues es una lástima, porque podría ser mucho mejor con algo más de imaginación en los platos y un servicio profesional, pero tampoco se le pueden pedir peras al olmo. Positivo veo la cantidad de las raciones, calculadas en función del número de comensales; en nuestro caso, raciones pequeñas que hacen poder degustar más variedad de platos, pero, como dije antes, la tercera vez que pides tienes la sensación de haberlo pobrado todo.

Un sitio agradable para cenar por buen precio, por ejemplo, en una celebración de amigos o familiar.

P.D.: Nuestra intención era cenar en Nagato, pero estaba cerrado por vacaciones.

Buffet libre a la carta con servicio de camareros. A mediodía 9,95€ + IVA + bebidas.
Pedimos arroz, tallarines, brochetas de carne, bolas de cerdo rellenas de queso y un plato de sushi variado. Todo correcto.
Conviene no calentarse a la hora de pedir ya que las raciones son abundantes. De hecho delante de nosotros se estaban llevando platos enteros de comida.
La carta de vinos no está mal, los precios muy razonables (Les Alcusses, sobre los 15€) y las copas son buenas (incluso para el agua)
Servicio rápido y amable.

Coincido en la mayor parte del comentario de Dani. He notado una franca mejoría en esta segunda visita. Efectivamente, la carta de vinos es bastante más amplia que en otros restaurantes de similar corte, y las copas Rona, aunque no tomamos vino, sí mejoran y mucho las que se observan en otros orientales. El servicio es atento, y te puedes comunicar perfectamente en castellano, aspecto que valoro bastante.
De la carta, que funciona como buffet libre (con platos distintos respecto si vas entre semana a fin de semana) tomamos rollo de pato, dim-sum, arroz frito con pollo y ternera crujiente (tal vez lo que menos me gustó por el tipo de rebozado). Todo bastante bueno, aunque un poco demasiado dulzón tanto el arroz con pollo como la ternera. También pedimos sushi variado, maki california y sashimi variado.Buena calidad del pescado y buen trato del arroz, compacto pero no apelmazado.
En definitiva, creo que es una buena opción en cuanto a tipo de restaurante en caso de que quieras comer por la zona. El precio incluye bebidas que no entraban en menú y son cobradas aparte.

En una de las calles más bulliciosas de Cánovas, encontramos este restaurante asiático que no llama la atención respecto al resto que encontramos por el camino. Tal vez no hubiésemos entrado porque no tiene ningún atractivo especial, pero leímos los comentarios en Verema y nos decidimos a entrar a probar.
Restaurante de estilo buffet libre con carta y servicio del camarero, algo que se agradece, sobre todo si vas en pareja y te apetece una cena más tranquila. El menú de noche marca 13,95 pero no marca el IVA (de nuevo otro restaurante que se salta a la torera la normativa de no incluir el IVA), así que tras el 8% de incremento, la cosa asciende a poco más de 15€.
La carta es bastante escueta, pero todo lo que pedimos nos pareció bastante bueno, a destacar el sushi variado que estaba realmente bueno. Las preparaciones al vapor no son caseras, pero están bien cocinadas y los tallarines udon, que cada día me gustan más, estaban muy ricos. Lo que menos nos gustó fue el Temaki, al que le falta algo de chispa e imaginación. El sushi, insisto, es lo mejor de la carta: perfecto el arroz, pescado fresco de calidad, bien de humedad y textura. Una lástima que olviden la anguila, las huevas, el pez volador o el pez mantequilla en la elaboración de estas pequeñas delicias, pero el pulpo, el atún, la caballa, el salmón, etc. están riquísimos.
El servicio del vino sorprende gratamente, no porque sea una maravilla, pero la carta tiene algunas cosas interesantes a buen precio, presencia bastante acertada de espumosos, copa Rona de buena calidad, servicio poco instruido pero sirven el vino y están atentos en todo momento.

Si te encuentras por la zona, una opción bastante interesante de cocina asiática en Cánovas, por supuesto en este rango precio.

Restaurante japonés con una muy buena relación calidad-precio. Disponen de un menú buffet servido en mesa por 13'95 euros por las noches, con un servicio bastante bueno y eficaz, puedes llenarte de sushi por un precio módico, una calidad aceptable y sin tener que levantarte de la mesa cada 2x3. Bastantes platos a elegir en el buffet, makis variados (california rolls, atún rojo, salmón, pepino...), niguiri, sashimi (excelente la caballa marinada, a mejorar el pulpo demasiado duro), y más platos de entre los que destaco: los rollitos de pato, el arroz especial y la bolitas de cerdo rellenas de queso. Carta de vinos sorprendente para tratarse de un local de estas características.
Me parece una opción muy interesante.

Enésimo restaurante de cocina oriental. Decoración alejada del concepto asiático que tenemos, cómoda y funcional. Mantelitos individuales y copas (Rona) diferenciadas para agua y vino. Aunque no pedimos vino, si que pude echar una ojeada a la carta, bastante más completa de lo que es usual en este tipo de restaurantes. Pedimos rollitos primavera y de pato, pincho de gambas, bolsitas (ahora no recuerdo el nombre "técnico") al vapor rellenas de carne y gambas, sushi variado, maki de langostino rebozado, pollo con salsa especial y arroz especial.
En mi opinión nada por encima o por debajo de la media, aunque el sushi me pareció francamente discreto. Señalar que aunque disponen de carta, el restaurante parece enfocado al concepto de buffet libre servido en mesa (9 euros mediodía, 14 euros noche y fin de semana). Atención amable como se presupone en esta clase de sitios, ningún problema con el idioma.