Dia 1 de enero de 2011. Alojados en el hotel Plaza de Andorra y viendo que muchos restaurantes de Andorra la Vella estaban cerrados se nos ocurrió llamar para ver si disponían de una mesa para dos en el Rusc.
- "lo senitmos señor, estamos completos"-. No me lo creo. Y como no me lo creo cogemos el coche y no plantamos en el restaurante alrededor de las 22.00 horas. "Tienen una mesa para dos?" "Claro, no faltaba mas".
Mal inicio.
No hacemos ningún comentario y nos disponemos a disfrutar de un buen ágape. Ya habíamos estado alguna otra vez y guardábamos un muy buen recuerdo.
Aperitivos de la casa:
- Un caldo de carne para empezar. Un poco salado
- Pulpo a la gallega. Muy bueno
- Banderillas con boquerones en vinagre, guindilla y aceituna. Correcto
De primero compartimos una ensalada tíbia de bogavante (27€). El bogavante estupendo, en su punto y muy sabroso. El resto con un exceso de vinagre.
De segundo yo pedí un cogote de merluza con ajos fritos(25€) que estaba de rechupete.
Mariola se pidió unos escalopines de ternera gratinados con queso de Idiazabal (25€). Correctos sin mas.
Lo mejor sin duda fué el postre: una pirámide de mousse de fresa con el helado de plátano. Celestial.

En cuanto al vino tienen un carta bastante extensa con buenas referencias a lo que se refiere a vinos franceses de bordeaux, bourgogne y champagne a precios x2 y en algunos casos x3.
Copas scotch zwiesel sencillas y las mismas para el agua que para el vino.
Tomamos un Borsao Tres Picos Garnacha de 2003. Junto con el postre lo mejor de la cena. Un vino maduro, amable, lleno de fruta y vainilla y con unos taninos dulces y pulidos.
No se ofreció el decantado (no creo que le hiciese falta) y el camarero, muy atento, siempre pendiente que las copas estuvieran llenas. Buen servicio.
Buenos cafés.

El Rusc es una buena opción si se està por Andorra, pero por favor, seamos serios en cuestión de reservas. Si alguno de los profesionales que están allí no les apetece trabajar que no se inventen que no disponen de mesa.

No fue el mejor día, ya que había un grupo y el servicio fue muy lento, nos comimos todo el pan y nos bebimos el vino antes de que empezaran a traer la comida. (pedimos más)

- Lentejas con vieiras, 19€ - Buenas
- Ensalada con salmonetes, 17€ - Muy buena
- Ostras gallegas, 21€ - Buenísimas
- Alubias estofadas, 13€ - Buenas
- Almejas con salsa, 27€ - Buenas
- Cochinillo al horno, 23€ - Bueno
- Filetes gratinados, 25€ - Buenos

- Milhojas de chocolate negro, 9,50€ - Bueno
- Fondant de chocolate, 10€ - Bueno
- Creps suzette, 12€ - Muy bueno

- Café, 2.50€ - Normalito (bueno para ser Andorra)
- Agua, 2,50€
- Jean Leon Cabernet 2004, 22€

Cobran 3€ por cubierto

Como cada año, tocaba escapada en plan relax a Andorra.
Esta vez nos decidimos por El Rusc, habiendo leído las valoraciones del resto, no lo dudamos.
Restaurante a la salida de La Massana, de estilo masía, bien decorada, clásica y ,coincidiendo con algún comentario anterior, si el restaurante no está lleno es un poco frio de ambiente.
Servicio impecable por parte del personal (Jefe de sala y camareros).
Nos decantamos por el menú degustación a 58€ p.p.
Los aperitivos:
-Croquetas de la casa (buenas)
-Migas de dorada sobre confitura de tomate (correctas)
-Bastoncillos de queso con aceite de tomate (buenos)
-Chistorra (muy buena)
-Ravioli de foie (muy bueno)
Los primeros:
-Ventresca de atún sobre ensalada de tomate (muy bueno)
-Risotto con almejas y setas (sabor buenísimo, el grano de arroz algo duro)
Los segundos:
-Dorada a la parrilla sobre una "fideuá" (excelente, aunque no nos sirvieran dorada, creemos que era rodaballo!?)
-Foie fresco de la casa a la brasa (excelente)
Postres:
-Galleta tipo "brownie" con sorbete de limón (bueno)
-Helado de pistacho y helado de "marsh mallows" (el primero correcto, el segundo muy conseguido, efectivamente tenía sabor a la golosina)
Pettit fours (correcto, aunque el sorbete de maracuyá o fruta de la pasión, no pegaba mucho como acompañamiento del café), cafés y copa de brandy (calentada).
Vino: Blanco Pradorey Tres Barricas. Verdejo 100%. Bodegas Pradorey. D.O. Rueda.(bien servido, guardado en cubitera con hielo picado. Maridaba bien con toda le cena)
En definitiva, un muy buen restaurante con toque distinguido, buena materia prima y bien ejecutada. Amplia oferta de vinos y licores. servicio atento pero serio.

Ya lo conocia de anteriores ocasiones y lo encontré siempre algo frio de ambiente. Esta vez habia bastantes mesas ocupadas y no me dió esa sensación.
Entradas a base de habitas estofadas con butifarra (soberbias) y plato de jamón normal tirando a bueno. Filetes de buey a la parrila, riquisimos y en su justo punto los poco hechos. Un recomendado Torremilanos de 2004, mal servido y con inadecuadas copas. Un vino de 24€ merece una copa adecuada, que permita probarlo, moverlo, degustarlo... Si la sopa se sirve en plato hondo, ¿porque el vino lo sirven en una copa de agua?
Un servicio muy atento, profesional y correcto. Unos buenos aperitivos y para final unas "petites fours" que permiten pasar al café sin remordimientos por no tomar postre.

El sabado volví a El Rusc, uno de los mejores restaurantes de Andorra.
Es una cocina tradicional actualizada,trabajan con una buena materia prima pero no arriesgan mucho en la elaboración, excepto en los aperitivos que fueron sorprendentes.

Siempre pido menú degustación, para poder disfrutar de las novedades en los aperitivos.

Aperitivos:

-Patata con pipas, una lámina transparente con pipas- muy buenas
-Chips de boniato y creo que yuca con salsa de queso- bueno
-Crema de cebolla con pan tostada- sensacional
-Caviar de pepino con crema de escalibada- bien
-Palitos de parmesano con chupito de tomate y orégano- riquico

Primeros:

-Ensalada de carpaccio de remolacha que pies de cerdo - buena presentación y elaboración pero no es un plato que me aporte nada.
- Risoto con Almejas- bien

Segundos:

-El pescado fue lubina con reducción de vinagre- sensacional
-Las últimas veces el plato de carne no lo han variado, carne a la brasa de muy buena calidad y en su punto, presentada con diferentes tipos de sales.

Bebida para 5 persona: agua, cerveza Insolit, vinos: Jean Leon Cabernet Sauvignon 2002 y Perinet 2005

Fueron muy amables con nosotros y el servicio correcto como siempre

¡OJO EL PREFIJO DE TELÉFONO QUE HAY EN LA PÁGINA DE VEREMA CORRESPONDE A PORTUGAL!

Teléfono correcto: +376838200

Vuelvo casi 3 semanas después al ser una apuesta segura. He decidido añadir una nueva ficha para complementar el comentario anterior y confirmar que es un muy buen restaurante. Después de dos semanas en Andorra, para mi, sin duda, el mejor.

Cena para 1 pax:

Aperitivos de la casa:
Mouse de pimiento con caviar de pepino (delicado)
Rollito de salmón relleno de gorgonzolla con salsa de pesto
Caramelo de foie-gras (para repetir)
Mouse de tortilla de patatas (buenísimo)

Entrante:
Ensalada de manitas de cerdo sobre carpaccio de remolacha con rúcula y lascas de parmesano (buena presentación y soberbias las manitas)
Lomo de ciervo con castañas guisadas (tierno, muy bueno). Se repiten las guarniciones de hace 3 semanas, incluido las sales.
Postre: Catalonia. Se recrea la bandera catalana con un pastel alternando capas de mouse de fruta de la pasión y mouse de frutas del bosque. Le acompañaba un sorbete de frutas de la pasión. Todo muy fino y refrescante.

Variedad de detalles en la sobremesa. En este caso me gustaron mucho unos panelletes y unos mini-brownies.

Precio total (56€, incluida una botella de 1/2l de agua)

Con el cierre del Aquarius, L'Excellence y el Cyrano creo que se ha quedado como la referencia gastronómica de Andorra, por méritos propios. Lo he visitado cuatro veces en los últimos años y destaca con luz propia por su local (un chalet de montaña con un salón muy amplio, con buena separación entre mesas, ambiente rústico a la vez que lujosillo, servicio atento y profesional) y por su carta más orientada a la montaña que al mar.

Aperitivos de la casa:
Crema de ceps
Croquetas de jamón
Rollito de salmón relleno de queso gorgonzolla
Ensaladilla de rovellons y anchoas

No se puede pedir más. Variedad y perfectos de presentación. Los acompañé con una cervecita.

Entrante: Rovellons asados al horno. Perfectos y genial el toque de pan rallado y pimienta.
Segundo: Filete de buey (por supuesto de vaca) con una degustación de hasta 7 sales diferentes. Me gustaron la volcánica y la de tomillo. La carne perfecta, en su punto (la pédí poco hecha) y muy tierna. Guarniciones diversas como pimientitos, gratin de patatas y algunas lágrimas de mouse de coliflor y otra verduras.
Postre (pedido en la comanda): Una pirámide de mascarpone y vaimilla natural con un sorbete de frambuesa. Perfectos ambos.

Carta de vinos amplia e internacional. Muchos franceses y por supuesto prácticamente todas las DOs españolas. Precios para nada abusivos (casi x2). No pedí vino pero el servicio muy bueno en otras mesas. En este caso si puntúo servicio del vino por las experiencias pasadas.

Cestita con 3 panecillos variados.

Ponen dulces (hasta 4 diferentes) en la sobremesa y me invitaron a un pacharán casero riquísimo.

Precio total: 63.25€ (incluido 4% de impuestos, pan y servicio a 3€ y botella de agua de 1l a 3€.

Nota: Para mi sigue siendo un fijo en Andorra.

A Andorra se le achacan muchas falsedades y pocas críticas veraces. Una de dichas falsedades es la que refiere a su gastronomía...A muchas provincias españolas les gustaría disponer de un solo restaurante como algunos de los que puedes hallar en Andorra, en base a calidad, servicio y precio.

El Rusc es uno de éllos. Situado en un bonito chalet en la Carretera de Arinsal, a la salida del pueblo de La Massana, llegué con mi mujer el pasado Viernes Santo.

De cara a santificar la fiesta pedimos que nos hicieran un besugo a la parrilla, al estilo de Getaria. El punto de cocción, espléndido. Un Pazo de Señorans acompañó el festín. Los primeros, igualmente buenos pero dejaron menos recuerdo.

El servicio especialmente atentos, si bien fuimos los primeros, y eso es un plus...

La cuenta añadiendo postres, así y como un excelento aperitivo que te van trayendo (yuca, calçots finos, mejillones de roca...), hasta 83€ por cabeza. Los pago a gusto porque el besugo era mayúsculo