Lo visitamos en el pasado puente de diciembre. Comimos muy bien, os comento:
-Jamón de bellota (24E). buenisimo
-Consome y sopa castellana. buenas
-Bacalao confitado y solomillo de cerdo ibérico. buenos
-Postre, vino de la casa y cafes.

El servicio del vino inexistente.
La comida muy buena pero el monasterio excepcional. Para aparcar un infierno.

Estuvimos la semana pasada. Comimos bien,embutidos, quesos de la zona y una ensalada de perdiz. A mi hija le pusieron un plato de pollo asado con patatas que no se terminó. El postre fue el especial de la casa (flan de bellota, helado de castaña, helado de nueces y helado de turrón). Tampoco lo terminamos. La vajilla es preciosa y el entorno divino (nunca mejor dicho). El servicio del vino es para olvidar. Me quise tomar el café en el claustro (una pasada) y no hubo problema por parte de la casa. Lo malo fue que apareció una ruidosa excursión de jubilados y lo fastidiarion. Recordé "Crimenes ejemplares" de Max Aub. Me gustó.

Lo hemos visitado en varias ocasiones más y lo comentado más abajo sigue siendo válido, el servicio del vino no es bueno, el entorno maravilloso y la comida bastante bien sobre todo para el que le gusten los productos extremeños, también tienen otro tipo de platos.
El problema es el aparcamiento que en días de fiesta, hay que quedar el coche a la entrada del pueblo.

El comedar esta dentro del Real Monasterio (Ya Basílica) de Guadalupe, el entorno es una maravilla, el servicio excepcional, la cuberteria y vajilla muy buenas, todo de muy buena calidad. La cocina esta basada en los productos extremeños (criadillas de tierra, ancas de rana, cerdo iberico de bellota, ternera retinta, quesos del casar y de la Serena, etc.). Muy bien todo y con un precio no muy desajustado, sobre 36 € el cubierto.