Restaurante JapiJapo en Denia
Restaurante JapiJapo
País:
España
Provincia:
Localidad:
Cód. Postal:
Tipo de cocina:
Vino por copas:
Precio desde:
16,00 €
(precio más bajo introducido por un usuario)
Nota de cata PRECIO MEDIO:
28 €
Nota de cata VALORACIÓN MEDIA:
5.7
Servicio del vino SERVICIO DEL VINO
3.0
Comida COMIDA
7.0
Precio medio entorno ENTORNO
5.0
RCP CALIDAD-PRECIO
7.0
Opiniones de JapiJapo
OPINIONES
2

No había tenido ocasión de volver desde mi anterior valoración y hoy se ha presentado. Íbamos a "pillar" un poco de sushi para llevárnoslo a casa, pero...

Llegamos y tenemos mesa sin reserva previa (mucha menos gente que en mi anterior visita). Decidimos cenar allí. Insisto en la estrechez entre las mesas y lo incómodas que pueden resultar para una sentada larga. Servicio políglota que nos recibe con amabilidad. Confeccionamos muy rápido la comanda y ésta pasa a cocina:

- Gyozas (empanadillas) de pollo al vapor: Correctas.

- Variado de sushi 36 piezas (makis, frutomakis, niguiris, uraamakis y sashimi): Gran detalle e colocar 12 bocados todos ellos diferentes para que los tres comensales probemos de todo. Las porciones estaban bien consistentes, el arroz en un punto ideal y el pescado fresco y sin escatimar, especialmente en los sasimis de salmón, atún y pez espada. Cantidad más que suficiente.

- Anteriormente a la bandeja de sushi, nos han sacado unas edamame invitación de la casa pues consideraban que la tabla estaba tardando demasiado en salir. Tampoco era para tanto pero es n muy buen detalle que merece reconocimiento.

No hemos tomado postres ni cafés y hemos acompañado la cena con agua y cervezas Heineken (tienen Kirin). Aunque la sensación general ha sido muy buna no quiero obviar el detalle del calor que hacía en el restaurante. O el aparato de aire no funcionaba bien o éste es insuficiente para refrigerar el espacio salón/cocina. Habrá que mirárselo.

Local de reciente apertura en Dénia, muy cerca de la calle Marqués de Campo, auténtico centro vital de la ciudad, aunque últimamente venido un poco a menos en cuanto a la oferta gastronómica dado el auge que ha tomado la zona de la calle Loreto. Estancia diáfana en la que el comedor y la cocina se fusionan en un único espacio. Decoración en blanco, rojo y negro, con un estilo muy actual y desenfadado. Mesas con distancia ridícula entre ellas y barra baja de cara a la cocina donde puedes ver a los cocineros (hasta cuatro) trabajar con temple y maestría: todo muy “urbanita”. Habíamos hecho reserva telefónica el día anterior y, cuando llegamos, nos dicen que no quedan mesas. Hay que acomodarse en la barra. Detalle feo que otros no dejarían pasar. Nos trastoca pero aceptamos pues tenemos ganas de probar y ya es algo tarde (venimos de “ostrear” en el bar bus). Un inciso: el local también prepara sushi para llevar. Varias son las personas que entran durante el servicio a recoger su comanda.

Hemos pedido todo sushi aunque hay algunas propuestas de “cocina caliente” de cariz oriental, por supuesto: sopas, pasta, arroz, tempura...

- Edamame (3,50 €): las siempre adictivas vainas de soja con sal maldon.
- Nigiris de salmón (4 unidades: 8,00 €): Primero hemos pedido la ración de dos (4,00 €) y, como nos ha encantado, hemos pedido otra. Punto excelente del arroz y gran frescura del pescado.
- Niguiris de gamba (2 unidades: 4,00 €): Valoración similar a la que le precede.
- Sashimi de atún (6,00 €): apenas 6 pequeñas porciones de un atún mucho mejor en boca que a la vista (un pelín oscuro en demasía), pero comprensible con un precio así.
- Rollo de tempura de langostino (6 uramakis: 10,00 €): Rico. Adornado y condimentado con unas pinceladas de una especie de salsa rosa.
- Rollo especial Japijapo (6 uramakis: 10,00 €): Lleva atún, salmón y aguacate principalmente. Muy rico, quizás el mejor de todos.
- Makis de atún y pepino (8 unidadees: 6,00 €): Buena la combinación de ambos elementos.
- Bola de helado de té verde y de judías (3,00 €/cu): Correctas sin entusiasmar.

La valoración general del sushi es buena. El arroz está bien trabajado y el pescado es fresco. No hay creaciones excéntricas ni occidentalizadas que te puedes encontrar en otros sitios, pero tampoco riesgo ni complicación en cuanto a ingredientes y preparaciones como pudimos disfrutar en Momiji.

El servico del vino es inexistente. Con la toma de nuestra comanda nos preguntan qué queremos de beber. Al contestar “vino” nos dicen: – ¿Blanco o tinto? – ¿Hay carta? – No, solo un par de ellos. Optamos por pedir cava y nos ofrecen Juvé y Camps Rsva. de la familia. Las copas muy feas. Servido en cubitera, eso sí. Completamos con dos copas de vino blanco.

Buena opción para tomar sushi (la oferta es realmente corta aquí) y quizás mejor para llevar y tomar en casa. Los platos calientes que vi salir también tenían buena pinta. El servicio amable y voluntarioso. Repetiremos, eso seguro.

Calificaré comida y RCP como buena, entorno correcto y servicio del vino malo. Por el sistema de valoración de Verema ello me da una nota media o global de 5 puntos que me parece baja pero no quiero modificar las calificaciones pues son aquellas que se ajustan a lo vivido allí. Con un poco más de mimo al vino la nota subirá rápidamente.

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