Hotel de 4 estrellas a igual distancia (15 minutos andando) del centro que del Palacio de Congresos y con fácil salida hacia las autovias. Cerca de estación de trenes. Tiene aparcamiento propio aconsejable.
La habitación tiene tele y baño decoración clásica, ducha algo antigua, básicas amenities (y poca reposición); armario amplio, mesa de trabajo cómoda con wiffi; cama amplia y cómoda.

En desayuno no hay descafeinado de máquina. no hay opción de caliente en el momento (tortilla..), fiambre básico, no hay dulces locales.

Mal funcionamiento de forma repetida de la apertura de la puerta.

Personal muy amable; muy bien la limpieza.