Vivía justo detrás del hotel Londres. El proyecto en el que trabajaba estaba en la sede del banco guipuzcoano que está cerca de la sede del Correo, en el Antiguo. Bonito paseo en coche todas las mañanas a las 9 a.m. y al mediodía, aunque la vuelta del curro a las 2 a.m. se hacía más dura Lo "malo" de San Sebastián es que tiene tanta oferta gastronómica que al Rekondo sólo fui una vez durante el año que pasé allí, y cuando he vuelto he ido de pintxos, a comer txuletón al Portuetxe, al puerto a comer pescado.......